El Comandante de la Revolución cubana y vice primer ministro Ramiro Valdés Menéndez sostuvo hoy una reunión de trabajo en la ciudad de Camagüey, donde analizó el estado actual de la modernización de la Fábrica de Cemento 26 de Julio, de Nuevitas, y del programa de la vivienda en esa provincia.
Con notables atrasos en sus distintos objetos de obra prosigue la inversión en esa industria cementera, motivados por las limitaciones con materiales de construcción, equipos de izaje y combustibles, lo cual unido a problemas de organización y falta de fuerza de trabajo causan una baja productividad.
Valdés Menéndez conoció por directivos de empresas que participan en la ejecución del proyecto y funcionarios del sector de la construcción que existen dificultades en cuanto a la disponibilidad de grúas indispensables en el montaje tecnológico de la nueva planta, pues solo laboran cinco y otra está en proceso de documentación para incorporarla.
Junto a la insuficiencia de ese tipo de equipos, el vice primer ministro fue informado que de las ocho mil toneladas de acero requeridas en estos momentos, se han puesto apenas tres mil en la obra.
Rudy García Arce, director general de la Empresa de Cemento, puntualizó que hoy en las faenas de la modernización de la fábrica de Nuevitas existe una fuerza de trabajo de 700 constructores, cifra que prevén aumentar a 800, y es insuficiente aun.
Por otro lado, precisan de unos 80 soldadores homologados, de los cuales están laborando solo 36, agregó.
Sobre el aporte de empresas constructoras de distintas provincias también indagó Valdés Menéndez, y por ejemplo conversó con representantes de dos de ellas provenientes de Villa Clara y Las Tunas, las cuales no tienen todo su personal y equipos en función de las mencionadas tareas en esa obra.
Al analizar tales problemas, el Comandante de la Revolución aseveró que esta constituye una de las inversiones más importantes que realiza el Ministerio de la Construcción en la nación, y exigió que se le preste la máxima prioridad de los territorios involucrados, pues de su avance dependen varios programas del sector en el país.
También insistió en revisar la productividad que es del 61 por ciento en el montaje y la obra civil, y entre 38 y 41 por ciento en otras acciones, resultados sobre los cuales, alertó, resultan tan bajos que influyen en la calidad y el adelanto de las obras, determinados, asimismo, por la falta de personal, incidencias que se tienen que revertir con una atención sistemática.
El programa de la Vivienda y la urgencia de mejorar el deteriorado fondo habitacional del territorio -el más extenso de Cuba -, formó parte de la agenda de trabajo encabezada por Valdés Menéndez y las máximas autoridades del Partido Comunista de Cuba (PCC) y del Gobierno en la región camagüeyana.
En una rama que no escapa tampoco de las actuales carencias de combustibles y otros materiales no se aprovechan las capacidades y alternativas de cada municipio o localidad y la producción de elementos de construcción factibles con barro como los ladrillos.
Camagüey tiene experiencia de años atrás en el empleo de estos y varios objetos derivados de la arcilla utilizados en la edificación de viviendas, y están identificados 32 puntos de yacimientos en el territorio, algo que puede contribuir a la solución de viviendas.
A pesar de contar con sitios estatales y privados donde se producen ladrillos y otros renglones, sus producciones no alcanzan para suplir la gran demanda existente, por lo cual urge incrementar estos renglones.
Al respecto el vice primer ministro reiteró que hay que potenciar la producción local de materiales desde los consejos populares y los barrios, e involucrar más a las personas en esas tareas con una marcada repercusión social.
Hoy en Camagüey se logran alrededor de seis millones de ladrillos y para responder a la demanda necesitaría de más de 17 millones, según informó Yoseily Góngora López, Gobernadora.
Corresponde, consideró, trabajar desde todas las áreas a fin de transformar la difícil situación existente hoy en la provincia, donde hay que hacer 42 mil nuevas viviendas.
Camagüey muestra resultados desfavorables en los distintos subprogramas, y tiene acumulados casos de personas afectadas por ciclones, otras acogidas a subsidios, además del alto estado de deterioro del fondo habitacional existente, con más de la mitad de este catalogado de regular a mal.
Federico Hernández Hernández, primer secretario del PCC en la provincia de Camagüey, dijo al respecto que ha faltado agilidad y organización en este programa tan sensible en el cual el Partido tiene que apoyar y ofrecer seguimiento constante.
Remarcó el reto inmediato de lograr un trabajo cohesionado, junto al Gobierno y las entidades involucradas, y aprovechar las amplias posibilidades de producir materiales de la construcción a corto plazo con impactos en cada lugar, para resolver uno de los asuntos que más preocupa a la población: la vivienda.
(Tomado de ACN)