Aquellos jóvenes –seres de otro mundo, como dijera el poeta- no repararon en costos o en beneficios propios. Se lanzaron soñando la posibilidad de otro mundo; y de ellos, muchos no alcanzaron a ver las extensas consecuencias de sus actos –súbitamente se convirtieron en poesía, como saben hacer los mártires-. Lo hermoso es que un impulso raigal les había llevado a creer que, después del asalto,hasta el color del aire sería distinto.
Aquellos combatientes, casi todos con menos de 30 años en la hora cero, estaban en lo cierto: Cuba necesitaba y merecía ser otra, ser más digna y fraternal.
La entrega de ellos fue tan importante que llega hasta hoy, cuando la memoria es un modo de reverenciarlos, cuando este martes, desde la Escuela Superior del Partido “Ñico López” –nombre de uno de aquellos jóvenes inmensos-, dirigentes, funcionarios y trabajadores del Comité Central del Partido Comunista de Cuba celebraron el aniversario 69 del asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.
Fue un sentido homenaje, cuando falta poco para el 26 de Julio, fecha de los heroicos sucesos. Fue un breve y hermoso acto político cultural que contó con la presencia del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; del miembro del Buró Político y Secretario de Organización, Roberto Morales Ojeda; así como de integrantes del Secretariado del Comité Central del Partido, jefes y vicejefes de departamentos y oficinas del Comité Central.
En voz de la joven actriz Mirtha Lidia Capó fue escuchado el poema Era la Mañana de la Santa Ana, del Indio Naborí. Y seguidamente la exposición de una obra audiovisual de los Estudios Mundo Latino sobre el asalto del 26 de Julio, trajo a colación el ejemplo de Fidel, quien nos enseñó a convertir los reveses en victorias, quien nos legó la lección de la perseverancia, quien otra vez recordó en su voz que nuestros muertos heroicos no cayeron en vano.
El documental, además, dejó escuchar la certeza del General de Ejército, Raúl Castro Ruz, de que los cubanos en Revolución hemos corrido todos los riesgos, y recorrido invictos estas seis décadas de lucha.
Carnés a nuevos militantes del Partido Comunista, así como reconocimientos a un grupo de trabajadores con méritos en su labor,fueron entregados de manos del Presidente Díaz-Canel Bermúdez, y de Roberto Morales Ojeda.
A modo de cierre, como para recordarnos que aquel asalto se hizo soñando también la alegría y la belleza, los presentes pudieron disfrutar el arte de la trovadora Martha Campos, así como de Pancho Amat y el Cabildo del Son.