Han transcurrido más de dos décadas desde que arribaron los primeros galenos cubanos a Gambia para así dar lugar a lo que sería el nacimiento de la Brigada Médica Cubana (BMC) en esta hermana nación del occidente africano.
Muchos años han transcurrido, y el buen trabajo realizado por nuestros colaboradores se ha hecho sentir en toda la geografía de este país.
Disímiles y numerosas han sido las atenciones brindadas, cuyo objetivo ha sido elevar la calidad de vida de los pacientes de un pueblo agradecido.
Con nuestra ayuda desinteresada hemos demostrado durante todos estos años el verdadero significado de la solidaridad, ya que sin Cuba tener grandes recursos materiales, los humanos sí los hemos compartidos sin pedir nada a cambio, y un ejemplo de ello lo constituyen los profesionales de la salud que han estado donde más se le ha necesitado.
Seguiremos cumpliendo con nuestro deber para así preservar el legado de solidaridad e internacionalismo de la medicina de nuestra isla caribeña, haciendo Patria a través de la labor humana de salvar vidas.
Rechazamos enérgicamente las campañas mediáticas que se orquestan contra nuestro país protagonizas por grupos extremistas de la mafia radicada en Miami y odiadores que, financiados por Washington, pretenden crear una matriz de opinión contraria a la Revolución.
Desde Gambia, reafirmamos nuestros profundos sentimientos antimperialistas y nuestro compromiso con la historia de Cuba, con el respeto a nuestros símbolos patrios y con el legado de nuestro invicto Comandante en Jefe, Fidel Castro, quien nos indica siempre el camino correcto.
Ratificamos además nuestro respaldo a nuestro Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al Partido Comunista de Cuba, a nuestro General de Ejército, Raúl Castro, y a las transformaciones que se lleven a cabo con el objetivo de lograr un Socialismo próspero y sostenible, aún en el contexto del reforzamiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por EEUU a nuestro país.
Nadie podrá alterar la paz, la tranquilidad y la seguridad ciudadana que tanta sangre nos costó, y hoy con orgullo preservamos.
Al imperialismo y sus lacayos debe quedarle claro que No le fallaremos a la Revolución, porque la obra que construimos es de todos y nadie no las arrebatará, porque la estirpe rebelde la llevamos impregnada en nuestra sangre.
No le fallaremos a Fidel. No fallaremos, porque el Socialismo hace al hombre y por el contrario el capitalismo lo encadena, porque Cuba No está sola, y porque aún después de muertos alzaremos nuestros brazos y levantaremos la bandera de la estrella solitaria.
A los que continúan con su vieja pesadilla de destruir a la Revolución Cubana, les decimos como en Baraguá: ¡No nos entendemos!
Igual ratificamos como en Girón:
¡Viva la Revolución Cubana!
¡Viva Cuba Libre!
¡Patria o Muerte!
¡Venceremos!
Banjul, 11 de julio de 2022