La selección masculina cubana de baloncesto cayó ante Estados Unidos por abultado marcador de 64-87 en el coliseo de la ciudad deportiva habanera, para cerrar su participación en la ventana rumbo al mundial sin conocer la victoria.
«Van a existir cambios. Hay jugadores que no entran en la mecánica y debemos encontrar gente que crea en lo que propone el cuerpo técnico. Competir a este nivel es muy bueno y hay que seguir insistiendo en eso. Los partidos hay que ganarlos, todo lo que hemos hecho a veces es dar una buena imagen, pero en ocasiones es mejor jugar mal y ganar», declaró a Trabajdores el entrenador de Cuba, Eduardo Moya.
Moya mandó a la cancha al mismo quinteto abridor que en la derrota ante México el pasado viernes y la confianza dio buenos dividendos en principio.
Sigfredo Casero, Karel Guzmán, Neysser Coutin, Jasiel Rivero y Yoel Cubillas se mostraron a la altura en los primeros compases y unas efectivas rotaciones posibilitaron hacer daño a un adversario que aún estaba adaptándose.
La primera mitad del cuarto fue dominada por los antillanos que se llevaron el parcial 16-14, aprovechando el tardío despertar de los norteamericanos.
En el segundo periodo la historia cambió totalmente y un conjunto cubano muy errático sucumbió ante la velocidad y claridad de un rival que empezó a tomar confianza desde la larga distancia.
En cinco minutos los de Estados Unidos ya estaban 33-23 arriba y se fueron al descanso 42-30, una ventaja de 12 que se antojaba imposible de recortar.
Con el empuje de Polas, Cubillas y algunos aciertos de Casero, los de casa aguantaron esa desventaja en los inicios de un tercer cuarto que se fue de las manos en las postrimerías, en gran parte por la poca efectivad de cara a la canasta, mostrada por los pupilos de Moya.
La pizarra exhibía el tanteador de 67-49 con el que comenzaron los últimos diez minutos de puro trámite. Estados Unidos ganó el parcial 20-15 y selló el triunfo 87-64, poniendo fin a la agonía.
A pesar de que el conjunto cubano dominó en los rebotes y se mostró combativo en la pintura, una vez más los paupérrimos porcentajes de triples (21.4 por ciento) y tiros de dos puntos (41.50) lo condenaron al fracaso, frente a un contrincante totalmente superior con jugadores de la talla de Jordan Bell y Quinn Cook (campeones de la NBA) y una banca mucho más profunda e influyente.
Yoel Cubillas volvió a ser el más destacado por Cuba, con 15 cartones y nueve rebotes que le sirvieron para 17 créditos de eficiencia, al tiempo que el ex NBA Xavier Munford resultó el mejor por los estadounidenses con 24 puntos, tres rebotes y par de asistencias.
De esta forma cerró la participación cubana en el camino a la Copa Mundial. Seis derrotas sin éxitos fue el saldo para una escuadra muy inestable que por momentos ilusionó y mereció más, pero que en muchas ocasiones se mostró sin disciplina técnico-táctica, víctima de la anarquía.