De Diamante a Edén

Dentro de algunos años, probablemente ya muchos no recordarán de dónde le vino el nombre a El Diamante, comunidad homónima de la tienda construida allí por gallegos, y que era a lo sumo entonces, el lugar más importante de aquella comunidad perteneciente hoy a Santa Rita, en el municipio granmense de Jiguaní, y nacida en 1900.

Tampoco serán sus canteras de lajas y mármol lo único trascendente del lugar. Habrá otros motivos de satisfacción, como la inserción de varios jóvenes lugareños, a ese sistema osado pero imprescindible, que mira hacia dinamización económica con la participación de actores privados: la creación de micros, pequeñas y medianas empresas (Mipymes).

El Edén

Sugerente, optimista en nombre y esencia, funciona en El Diamante la microempresa El Edén.

Yubanys Salazar Álvarez y Andy Mosqueda Santos, socios fundadores de esta organización productiva de nuevo tipo, hablan de como desde hace mucho tiempo acariciaban la idea de crear una minindustria, para el procesamiento de vegetales, frutas y legumbres cultivadas por productores locales y que no siempre encontraban un destino final.

La llegada de las Mipymes les permitió concretar el proyecto, al cual se han integrado desde el pasado mes de enero nueve trabajadores y ya acciona en la elaboración de ocho surtidos, entre estos, pasta de ajo, puré condimentado y de ají, aliño, pulpa de tamarindo…

“Hasta el momento, señala Salazar Álvarez, los volúmenes no son muy grandes, porque casi empezamos, pero, de las múltiples gestiones de venta que hemos hecho, logramos contratos con una mipyme de la construcción que los utiliza para la elaboración de los alimentos de los trabajadores, con el gobierno local, y el sector del comercio en el municipio San Luis en Santiago de Cuba, además de las ventas que se realizan en un punto ubicado en la propia comunidad.

Proyecciones

El Edén acciona hoy en instalaciones rústicas, la cocción es a base de leña y para el mezclado de los productos se utilizan batidoras domésticas, lo cual exige un poco  más de esfuerzo, pero con la satisfacción de haber puesto en marcha el proyecto.

Mas, de micro podría en un futuro cercano, pasar a pequeña empresa, cuando se concrete su ubicación en lo que antes fuera una minindustria en Santa Rita, y la organización se sirva del local en arrendamiento, de algunos equipos, y además acoja en su colectivo a los trabajadores de esa procesadora, todo con la colaboración del Gobierno.

Además, destacan los socios, han presentado un nuevo y complementario proyecto para responder a la carencia de algunas materias primas, en lo fundamental azúcar, que les impide extender los surtidos.

Tal proyecto de desarrollo local, está orientado a la producción de melao de caña y azúcar ecológica a partir del encadenamiento con productores locales de la gramínea, y poder elaborar otras pulpas de frutas, dulces en almíbar, barras, y recatar las tradicionales rapaduras con ajonjolí y maní que tiempo atrás distinguieron a Jiguaní.

Inserción

El Edén, esa nueva empresa llena de sueños y voluntades que sin dudas distinguirá en un futuro a El Diamante, se inserta en el universo de mipymes jiguaniseras, donde se agrupan 36 nuevas entidades de ese tipo aprobadas, entre estas dos se servicios de transporte.

Eugenio Javier Hernández Pérez, al frente junto a Yanieisa Provance Moreno, de la identificada como Empresa de talleres y reparaciones HIP, habla con optimismo de esa pequeña empresa en organización, la cual aglutinará a 35 trabajadores.

“Ya desarrollamos labores de reparación y mantenimiento automotriz, y preparamos condiciones para la transportación de pasajeros dentro de la localidad y en el territorio nacional, objetivo este último para el cual contamo con dos ómnibus Yutong arrendados.

“Tenemos muchos planes, como el montaje de una planta de fregado, insertar las actividades de chapistería y pintura, y todas cuantas sean viables para ayudar a dinamizar los servicios y la economía.”

El municipio cuenta, además, con dos mipymes de producción de alimentos, igual número de servicios informáticos, y el resto de producción de materiales de la construcción y servicios constructivos, las cuales, en conjunto, según Yosván Pérez Fuentes, funcionario del Gobierno en Jiguaní que atiende la estrategia de desarrollo local, han generado en sus inicios alrededor de 400 empleos.

Otras miradas

En medio de una innegable depresión económica mundial, las mipymes son uno de los mayores desafíos que asumen hoy muchos cubanos, porque amén de obstáculos y frenos objetivos, han tenido la admirable voluntad de diseñar y echar andar sus proyectos, con conciencia de que, con trabajo continuo, progresivamente, las harán avanzar.

Con esa misma disposición Jiguaní impulsa a la vez otros proyectos económicos y sociales, entre estos últimos, el programa de recuperación de consultorios médicos.

El doctor Julio César Pérez Labrada y la enfermera Isabel Galardy Montejo, bien conocen de tal voluntad. Hablan a gusto de la remodelación general del consultorio donde atienden poco más de mil 300 habitantes en el reparto santarriteño Las Van, un nombre suigéneris que dicen hace alusión a la persistencia de algunos moradores de asentar allí sus viviendas, y que hoy bien sintetiza el esfuerzo de un país que, en cada jornada desafía crisis y bloqueo para mejorar la vida de su gente.  (Tomado de La Demajagua)