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Cargando...Cienfuegos.- Proyecciones, carreras, gritos y sudor inundan el colchón de lucha de la Eide Jorge Agostini. Con la mirada atenta Yadiel Porra, entrenador principal de ese deporte en la provincia entre las chicas, repasa cada movimiento de un puñado de sus discípulas que sueñan con triunfar. Llegar lejos en su vida deportiva.
“Ahora entrenamos a doce luchadoras, ocho escolares y una juvenil que radican acá en la escuela, más tres que pertenecen a la Epef”, asevera mientras con su silbato pone a fin a un complicado ejercicio.
“Tenemos una buena base. Hemos trabajado con la reserva y estamos felices por eso. Asimismo, recorremos los tres municipios en el territorio que practican nuestro deporte en busca de talentos”.
Asevera Yadiel que a pesar de esa estrechez los preparadores de la base se esfuerzan y cumplen lo establecido, gracias al asesoramiento de los técnicos de la Eide. También asegura que los padres aceptan que sus hijas practiquen la lucha.
“Eso cambió. Son otros tiempos, Lo aceptan y hasta me ayudan. Es complicado trabajar con las niñas en algunos aspectos. Por ejemplo, en la fuerza. Los varones llegan mejor en ese aspecto. Ellas precisan de ejercicios especiales, paciencia y comprensión”.
“Llevo cuatro años trabajando con niñas. Me gusta, he aprendido mucho y ya tenemos buenos resultados, acompañados de medallas. Si dudas se ven los avances”, enfatizó.
Sueños al pie del colchón
“Desde que era una niñita me gustó la lucha”, dice Lianna Rizo, una de las mejores alumnas de Yadiel “me llamaba la atención las técnicas. Yo quisiera que más niñas la practicaran. Mi familia me impulsa a seguir pues quiero ser algún día del equipo nacional”.
Toma la palabra la sonriente Glendy Barriento, “Soy de Aguada. Veía a las niñas peleando y decidí acercarme al profesor. Me hicieron pruebas y entré a luchar. En quinto grado ingresé en la Eide y aquí estoy. Quiero seguir ganando medallas, y en el futuro integrar la selección cubana”.
