La realidad del Chelsea está siendo cada día más dura y Thomas Tuchel afirmó que el equipo ni siquiera puede coger un vuelo a Middlesbrough para jugar los cuartos de final de la FA Cup este sábado.
La única solución, de momento, es hacer un viaje en autobús de más de 10 horas hasta el Riverside Stadium por culpa de las sanciones del Gobierno Británico sobre Roman Abramovich, propietario del club. El límite que se le ha puesto al club es de 20.000 libras esterlinas por viaje y los costes lo superarían.
(Con información de Mundo Deportivo)