El proceso político de información, discusión y análisis del Plan y el Presupuesto de la Economía para el 2022 avanza en Sancti Spíritus y se consolida como un ejercicio participativo para movilizar las potencialidades de los colectivos laborales en función del despegue económico y productivo del territorio.
Las casi 1 300 asambleas efectuadas hasta inicios de marzo en la central provincia, han sido tribuna para valiosas propuestas devenidas del intercambio cara a cara entre administración, sindicatos y trabajadores, para revertir los bajos niveles de actividad y subutilización de las capacidades productivas de algunas entidades.
La carencia de materias primas, la inestabilidad en el aseguramiento de combustibles y otros portadores energéticos, los elevados precios de los insumos, así como insatisfacciones con la distribución de salarios y utilidades constituyen realidades objetivas que ponen freno al despegue de algunos renglones, reconocido de esa manera en la mayoría de estos espacios.
Desde la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en Sancti Spíritus se insiste en garantizar la calidad del proceso, con énfasis en las empresas con pérdidas, donde se exige la presencia de miembros del organismo superior.
“A los principales cuadros del movimiento sindical les corresponde el control y seguimiento a los acuerdos y planteamientos derivados del proceso, porque la intención es que todos los asuntos sean respondidos”, aseguró Oslidia López Martín, miembro del secretariado de la CTC en el territorio.
En la provincia se planificaron más de 3 000 asambleas, donde tendrán la posibilidad de participar y emitir criterios alrededor de 112 019 espirituanos.