Desde el dos de febrero ocurre un trascendental proceso de consulta popular en todo el país, se debate el proyecto del Código de las Familias, que parte de la necesidad de atemperar las leyes cubanas, la sociedad y la familia en general, evidenciándose la voluntad del Estado de crear una norma para proteger al núcleo familiar, alejado de cualquier tipo de discriminación y violencia.
El documento, desde el Título I al XI, con sus respectivos Capítulos y Artículos, destaca por fortalecer la responsabilidad familiar desde el punto de vista emocional, educacional, formativo y económico en la atención a sus miembros, además de resaltar la pluralidad de familias existentes en Cuba hoy, entre otras cuestiones.
La participación ciudadana en las reuniones previstas es decisiva para el enriquecimiento del manuscrito a convertirse luego en Ley, por tanto, estudiarlo es imprescindible para su análisis en la población, donde el rol de los juristas es primordial en la orientación y explicación del proyecto que se discutirá hasta el próximo abril.
Al respecto, la presidenta del Tribunal Especial Popular de la Isla de la Juventud, Leydis Beisy Rivero Cardero, quien junto a seis profesionales del Derecho del sistema de tribunales pinero ejerce como consultora, explicó que la importancia del proceso está «en que la población pueda ofrecer sus criterios respecto al proyecto basado en una reforma total del Código actual, y en principios tales como responsabilidad parental, el amor, también está dirigido a cuestiones como la violencia y la discriminación familiar y es importante que la familia, célula fundamental de la sociedad, conozca sobre ello.
“Cuestiones trascendentales como la obligación de dar alimentos a mujeres embarazadas en favor del concebido, es de las novedades que tiene, también amplía el derecho de la comunicación a los parientes afines, no solo con los menores de edad, sino también con adultos o en situación de discapacidad.
“Es un Código que reconoce la multiparentalidad y la gestación solidaria como aspectos singulares no concebidos en ninguna legislación en el país. Varían los términos y concepción de patria potestad por la de responsabilidad parental, ello no significa que los padres tengamos menos derecho sobre los hijos sino que se amplía esa gama de responsabilidades y se incluye la de velar por el entorno digital al cual están sometidos nuestros hijos.
“Reconoce la unión estable, singular, de hecho, formando un proyecto de vida en común. Son varias las cuestiones que trae aparejado este proyecto, inserta la mediación para solucionar conflictos familiares sin llegar a la vía judicial, al tribunal; habrá un órgano mediador que resuelva estos litigios y establece la caracterización de la institución del matrimonio y de las demás que se derivan de ello en relación con el derecho internacional privado”.
Acerca de la experiencia en las reuniones donde ha ejercido como consultora, Rivero Cardero subrayó:
“Las cuestiones más debatidas en la población están relacionadas con el matrimonio y la forma que ha sido concebida en el Código, se trata de las familias y no de la familia porque ya se está reconociendo que existen diferentes tipos en la sociedad cubana. Los ciudadanos emiten criterios a favor o en contra y eso se recoge en acta, pues es un espacio para conocer los criterios.
“Tenemos que reconocer que en las consultas no todas las personas están debidamente preparadas en relación con los temas a analizar porque no ha sido posible, por cuestiones objetivas del país, llegarles a todos con el proyecto del Código impreso pero eso no quiere decir que no hayamos tenido acceso por los distintos medios de difusión e incluso por la vía digital”. (Tomado de Períodico Victoria)
[note note_color=»#d6bfba» text_color=»#1f0202″]Puede descargar: Proyecto del Código de las Familias (34117 descargas) [/note]