Alina Perera Robbio / Demetrio Villaurrutia Zulueta / René Tamayo León
Aunque a veces no nos percatemos, vivimos inmersos en una situación que debe ser entendida: estamos en medio de la guerra, una no convencional, mediática, que se desarrolla en un campo de batalla –el ciberespacio- al cual no estamos acostumbrados, y donde las armas son diferentes.
El Miembro del Buró Político y Primer Ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, compartió esa reflexión durante la reunión de trabajo anual del Ministerio de Comunicaciones (Mincom), la cual tuvo lugar, este viernes, en la sede de ese organismo y también contó desde la presidencia con el viceprimer ministro, Jorge Luis Perdomo Di-Lella, así como con la titular de Comunicaciones, Mayra Arevich Marín.
«Debemos pasar, en un combate, de lo defensivo a la ofensiva. Necesitamos adelantarnos, y no acostumbrarnos a reaccionar sino a tener una apreciación, una visión más larga y poder adelantarnos, y nosotros también entrar en este mundo complejo con nuestros mensajes, con nuestras verdades», dijo Marrero Cruz en el encuentro que hizo balance a lo realizado por el Mincom en el 2021, y que abordó prioridades del trabajo futuro.
Que los cubanos sepan defender su país en el terreno virtual, desde las redes, allí desde donde una maquinaria gigantesca y global mueve millones de voluntades, estuvo al centro de un análisis particularmente importante este viernes porque, como decía el Jefe de Gobierno, si un organismo está relacionado con los pilares de la Gestión del Gobierno en Cuba –que son ciencia e innovación, comunicación social e informatización-, ese es el Ministerio de Comunicaciones.
En las conclusiones del Balance, al hablar del trabajo político-ideológico como una prioridad estratégica, Marrero Cruz expresó que, al enfrentarnos cada día «a las disímiles tareas y responsabilidades» que la vida nos presenta, debe constituir una máxima nuestro pensamiento por «desarrollar, mantener, perfeccionar nuestro sistema socialista y nuestra Revolución».
El Miembro del Buró Político hizo una descripción del complejo escenario -mirando hacia lo interno, y también hacia el mundo- en que la Isla tiene que existir y desarrollarse: habló del bloqueo recrudecido, de la pandemia, de un país pequeño y con una economía abierta, siempre sujeta «a los vaivenes de la economía mundial».
En medio de todo eso -denunció Marrero Cruz-, persisten y se acrecientan las campañas enemigas por desacreditar a la Revolución y a sus dirigentes, y las más disímiles acusaciones y mentiras intentando pasar como verdades.
A contracorriente de todas las limitaciones, como razonó el Primer Ministro, Cuba batalla por su soberanía alimentaria; en ella se trabaja para contrarrestar situaciones que impactan negativamente en la población como los altos precios o la inflación; se diversifican los actores económicos mientras la dirección del país no pierde de vista la necesidad de que la Empresa Estatal Socialista sea más eficiente.
De los jóvenes y la actitud que han mantenidos en estos tiempos duros de pandemia, de los tres pilares en que se sustenta la Gestión del Gobierno habló también Marrero Cruz, quien, al referirse a la ciencia y la innovación subrayó la necesidad de implementar las mejores investigaciones; y en cuanto a la comunicación comentó sobre la necesidad de hacerla más correcta y efectiva, en un idioma claro, que el pueblo entienda, aunque los temas sean complejos de explicar.
En cuanto a la informatización valoró que si algo necesitamos, con las limitaciones que nos marcan, es «informatizar procesos, ahorrarle a la población gestiones de trámites que traen también implícitos disgustos e insatisfacciones». Se impone, agregó, «la evolución a una política de transformación digital que nos lleve a una agenda digital del país».
«Este, enfatizó, no es un proceso puramente tecnológico sino, en primer lugar, cultural, en el cual debe primar la transformación de los procesos productivos, comerciales, sociales, y de todo tipo, para poder llevarlos a los ciudadanos en los nuevos códigos de la interactividad digital».
En otro momento, a propósito de lo analizado durante el Balance, Marrero Cruz dijo a directivos y trabajadores del Mincom: Hay que orientarse a resultados más concretos en el avance de los cinco proyectos que ustedes tienen bien definidos: infraestructura, televisión digital, comercio electrónico, gobierno electrónico, e informático. Y resaltó que el organismo tiene ese propósito «muy bien localizado en el marco de los macroprogramas» con que cuenta el país.
«En esta guerra mediática –afirmó el Jefe de Gobierno- el papel de ustedes es clave». Nosotros tenemos la fuerza,meditó, pero hay que organizarla, conducirla, apertrecharla en conocimientos ante una batalla que será larga, que no solo ha de darse sino también ganarse. Por lo anterior, Marrero Cruz dijo que «el trabajo de este organismo es primordial para el desarrollo de la nación, en un mundo cada vez más globalizado y conectado digitalmente».
El preámbulo de esa intervención fue el Balance que pasó revista, en voz de directivos del Mincom, a temas como los servicios públicos de telecomunicaciones, el avance de la televisión digital, los servicios de Correos de Cuba, y la ciberseguridad.
Entre otros datos de interés, se supo que la industria de aplicaciones en servicios informáticos acrecentó su productividad en 2021, y que se consolidó la puesta en marcha de dos parques científico-tecnológicos. Fueron aprobadas, además, decenas de mipymes, de las cuales 42 están constituidas y cinco ostentan cierta capacidad exportadora.
A pesar de ser un lapso difícil, en 2021 el Mincom avanzó en los niveles de conectividad y ancho de banda de hospitales y otras instituciones de importancia; desarrolló aplicaciones para dar soporte al registro de vacunación en frontera y en otros servicios; y en cada tarea contó con sus jóvenes, los mismos que trabajaron en comunidades y en centros de salud, en zonas rojas, en tiempos de COVID-19.
La ministra Mayra Arevich hizo un retrato de las dificultades, así como de las proyecciones del Mincom para el 2022.Habló de un Programa de transformación digital que no pierda de vista al municipio, del desarrollo de la infraestructura de los servicios públicos de telecomunicaciones (llegar a zonas aisladas y polos productivos), de la televisión digital terrestre, de consolidar gobierno y comercio electrónicos, de desarrollar herramientas informáticas para el uso de grandes cantidades de datos.
Desde una mirada que no se detuvo en autocomplacencias, se sumaron las voces de varios directivos del Mincom. Y a todos los unió una idea común: a pesar de lo difícil que fue el 2021, el organismo logró avances en múltiples caminos, y eso da fuerzas para asumir los grandes desafíos que quedan por delante, desde un espacio de trabajo que decisivo para Cuba.
INDUSTRIA ALIMENTARIA: EL DESAFÍO DE AVANZAR PORQUE EL PAÍS LO NECESITA
Como sector estratégico del país, el miembro del Buró Político y Primer Ministro Manuel Marrero Cruz llamó a los trabajadores del Ministerio de la Industria Alimentaria a romper todas las trabas que impiden un mayor avance en la misión que le corresponde desempeñar a este organismo: «hay que buscar más alternativas, y ese es el idioma en que debemos hablar».
Con este mensaje concluyó el premier cubano su intervención durante la reunión de trabajo que evaluó los resultados del pasado año y las proyecciones del MINAL para el 2022, encuentro que sostuvo luego de intercambiar, iniciado la mañana de este viernes, en igual sesión pero con las compañeras y compañeros del Ministerio de las Comunicaciones.
«Estamos conscientes —señaló a directivos y trabajadores de la Industria Alimentaria— de que los problemas objetivos frenan, pero hay que irse por encima de eso, producir más porque la vida nos ha enseñado que se puede, tenemos la confianza en que sí».
Con la presencia del viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca y el titular del sector Manuel Sobrino Martínez, presidentes de Grupos Empresariales e invitados, transcurrió el encuentro que tuvo entre sus puntos de debate qué más se puede hacer con lo que tenemos, la importancia de la preparación de los cuadros, los cambios de mentalidad que las circunstancias actuales demandan y la impostergable necesidad de producir más alimentos para el mercado nacional.
2021: AÑO DIFÍCIL
Marcado por la COVID19, el sector de la industria alimentaria no escapó al impacto generado por la pandemia, algunos de carácter objetivo y otros subjetivos que afectaron los resultados económicos del organismo.
Treinta y cinco de sus empresas cerraron el período con pérdidas, y en relación con las 43 medidas aprobadas para potenciar una mayor eficiencia del sistema empresarial no se aprovechan todas las posibilidades que ellas ofrecen, 41 se ajustan a la misión del ministerio y de ellas solo 34 avanzan.
Asimismo no se logra un adecuado encadenamiento con las formas no estatales de producción y la principal misión la de producir alimentos con destino a la población, generó al finalizar el 2021 resultados por debajo del año precedente en renglones como el procesamiento de la carne de cerdo y las conservas de varios surtidos, entre otros.
El Grupo Alimentario tiene como reto para el 2022, recuperar importantes producciones que dependerán del aprovechamiento y la implementación más eficiente de las 63 medidas aprobadas por el Gobierno para dinamizar las producciones agropecuarias y su contratación.
LEY DE PESCA: RECUPERAR EL TIEMPO PERDIDO
Desde su puesta en vigor en 2020, la Ley de Pesca suscitó diversos criterios a partir de incomprensiones o desconocimiento de parte de su contenido por algunos de los productores de las 178 comunidades pesqueras del país.
Como resultado, 96 planteamientos han surgido de los trabajadores acerca del documento jurídico, tema sobre el que indagó el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, ¿qué enseñanzas deja este proceso y cómo se promovió el intercambio en las comunidades pesqueras?, preguntó.
Es un proceso aún no concluido, «debemos hacer una valoración general cuantitativa y cualitativa, para ir cerrándolo, en aras de rectificar o aclarar lo que sea necesario», señaló Marrero Cruz.
Varias intervenciones coincidieron en que ha sido un proceso dilatado en el tiempo, lastrado por la inadecuada capacitación del personal para implementarlo adecuadamente. En el primer semestre del actual 2022 uno de los retos de este ministerio será el de concluir el recorrido por las 178 comunidades pesqueras del país en aras de cerrar este intercambio.
La Ley de Pesca podría tener un impacto muy favorable en la producción de alimentos y la conservación del ecosistema pesquero cubano. Establece las regulaciones para el adecuado ordenamiento, administración y control de la pesca, en función de la conservación y el aprovechamiento racional de los recursos hidrobiológicos en las aguas marítimas, fluviales y lacustres de la República de Cuba, con el fin de contribuir a la soberanía alimentaria de la nación.
En el informe presentado por Sobrino Martínez, calificado de profundo y amplio por el Primer Ministro, se expresa la necesidad de consolidar las ventas mayoristas durante el presente año, avanzar en la recuperación de varias fábricas, impulsar las inversiones y destinar materias primas para tributar a mayores volúmenes de productos a la población, lo que requiere de estrategias para impulsar los encadenamientos productivos, y hacer un uso más eficiente de la materia prima que disponemos así como de la infraestructura instalada.
TRANSFORMACIONES EN SISTEMAS DE TRABAJO Y MENTALIDAD DE LOS CUADROS
El análisis del papel de los cuadros y el perfeccionamiento de los sistemas de trabajo fueron recurrentes durante la reunión en función de tributar a la principal misión del MINAL, la de producir alimentos.
El Jefe del Gobierno de la República insistió en la calidad y preparación de las contrataciones y la responsabilidad de los cuadros para negociar, que parte del conocimiento de los productores y la definición de la calidad de los productos para establecer precios.
«Nosotros tenemos el reto de cambiar las estructuras de acopio de las industrias lácteas, conserveras y de productos cárnicos», afirmó en este sentido el titular de la cartera, Manuel Sobrino Martínez.
El viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca dijo que el tema principal hoy es el de transformar el esquema de contratación con los productores. Coincidió con el criterio de que el proceso hay que cambiarlo y debe ir acompañado de la preparación de los cuadros para negociar.
Más del 80 por ciento de las producciones de leche y carne en el país se concentra en el sector no estatal, acotaba, y si no se garantiza una adecuada contratación entonces se traslada ineficiencia a la industria.
Tapia Fonseca manifestó que nuestra industria conservera, por ejemplo, debe trabajar durante todo el año, y llamó para que antes del mes de abril se realice un riguroso proceso de contratación con los productores.
SIN UNA BUENA CONTRATACIÓN, NO HAY PRODUCCIÓN
En las conclusiones de la reunión, el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz exhortó a avanzar en la búsqueda de mayor sostenibilidad en la producción de alimentos y consolidar la autonomía municipal, la agricultura urbana y suburbana.
Puntualizó que hay que priorizar los programas de Desarrollo Local con participación de los jóvenes.
Al referirse al papel del MINAL reiteró, «ustedes tienen un papel predominante por las actividades que realizan y un impacto grande en la alimentación del pueblo, sobre todo en el procesamiento de alimentos o de las materias primas. Hay que buscar la transformación de la mentalidad, y ante los obstáculos, los revolucionarios debemos crecernos y avanzar», sentenció.
«Y hay que producir más, pero con calidad e inocuidad de los alimentos, incrementando los controles empresariales». Sobre el proceso de contratación consideró que es uno de los asuntos más preocupantes y al que están asociados los problemas principales. Es estratégico para el MINAL, por eso es un proceso que debe llevarse con exigencia, «si no hay contratación no va existir producción».
Marrero Cruz añadió que «las medidas aprobadas por el gobierno, dirigidas a potenciar las producciones agropecuarias, han sido muy trascendentales». Llamó a revertir los incumplimientos en reglones de alimentos priorizados, e insistió en incrementar las producciones seleccionadas.
«Ha sido muy bueno el análisis realizado en el encuentro pero también deben aprovechar al máximo las medidas aprobadas para el sistema empresarial. Hay que romper todas las trabas que tenemos y analizar toda la estrategia del ministerio hasta el 2030», acotó.
ENCUENTRO CON MIEMBROS DEL MINISTERIO DE CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN
En la tarde de este viernes, el Jefe del Gobierno de la República participó también en la reunión de trabajo anual del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (CITMA), junto a la vice primera ministra Inés María Chapman Waugh y la titular de esa cartera, Elba Rosa Pérez Montoya.
Marrero Cruz reconoció el rol de ese organismo en el impulso e implementación del Sistema de Gestión de Gobierno basado en la Ciencia y la Innovación (SGGCI) en los diferentes sectores.
En un minucioso resumen de las actividades del CITMA en 2021, Pérez Montoya informó, entre otros muchos asuntos, sobre los principales resultados de trabajo en un período donde la estrategia fundamental del organismo estuvo dirigida a implementar los tres pilares de la gestión de Gobierno.
La informatización, la ciencia y la innovación, y comunicación social, fueron ejes de un hacer que «propiciara el continuo impulso al proceso de transformación de la gestión dela ciencia, tecnología e innovación(CTI) del país».
Entre los Principales resultados del trabajo en el 2021, la ministra del CITMA informó que se inició la implementación del Corredor Científico Cuba Innova y Crece, con resultados aún modestos pero promisorios en impactar en la necesaria sustitución de importaciones.
En su primer año, el Corredor Científico comenzó a conducir y visualizar, en intercambio con los organismos de la administración central del estado (OACE), los resultados productivos que se generan a partir de la introducción de investigaciones científicas.
Otros logros fueron los cambios en la composición de las entidades de ciencia, tecnología e innovación; y la puesta en vigor del Consejo Nacional de Innovación, que está liderado por el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
La ministra del CITMA reseñó, además, resultados vinculados al papel asesor del organismo en ciencia, tecnología e innovación; el fortalecimiento del fondo financiero para estas actividades (FONSI); la continuidad de la Educación científica y el reconocimiento social de la ciencia; y el incremento del diálogo con los jóvenes del sector, estudiantes y nuevos talentos, entre otros asuntos.
En el intercambio se produjo un enjundioso debate sobre ciencia e innovación, especialmente sobre qué hacer en el municipio, un asunto que requiere de una mayor capacitación y la instrumentación de herramientas claras y sencillas para que los actores políticos, gubernativos, económicos y sociales puedan emprender el camino que dará las respuestas y soluciones que urgen a escala territorial.
En las conclusiones del encuentro, el Jefe del Gobierno de la República, Manuel Marrero Cruz, realizó un análisis del contexto actual y el aporte que puede darse desde el CITMA en función de los retos que Cuba tiene hoy.
Un tema en el que insistió, fue en el trabajo con las y los jóvenes del organismo a los diferentes niveles; los jóvenes, con su decir claro, sin muchos vueltas —señaló— nos pueden enseñar mucho, y los jefes tenemos que aprender a escucharlos, a oír sus inquietudes, opiniones y también las respuestas que dan para resolver un problema.
A los jóvenes —añadió— hay que darle especial atención desde que llegan de la universidad; y hay que darles la oportunidad para que participen en todos los procesos y puedan ocupar responsabilidades, indicó Marrero Cruz.
En una evaluación del trabajo realizado por el CITMA en 2021 y las prioridades que se ha trazado para el año en curso, el Primer Ministro comentó que se han dado pasos de avance importantes y se han estado obteniendo resultados en los diferentes ámbitos de la ciencia, incluido las sociales, por lo que reconoció la labor de las mujeres y hombres que laboran en este organismo.