La representación de Cuba afirmó hoy en la ONU que será imposible el desarrollo social de los países mientras persistan medidas coercitivas unilaterales como el bloqueo de Estados Unidos contra la isla.
En su discurso en la Discusión General de la 60 sesión de la Comisión de Desarrollo Social, el embajador cubano Yusnier Romero detalló cómo el cerco norteamericano, recrudecido de una forma sin precedentes en la pandemia, afecta directamente la calidad de vida de todo un pueblo y obstaculiza los servicios públicos en su nación.
Tal política de hostilidad es una afrenta a los propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas y el derecho internacional, viola los derechos humanos y constituye el principal obstáculo al desarrollo económico y social del país caribeño, recalcó.
«Solo entre los meses de enero a julio de 2021, el bloqueo provocó daños a Cuba en un orden superior a los dos mil millones de dólares en todas las esferas de la sociedad, incluidas la salud, la agricultura, la alimentación, la educación, la cultura, el turismo, el transporte, las comunicaciones y la industria biofarmacéutica.»
Pese a ese mecanismo, Cuba sigue priorizando la protección de su población, sobre todo, en el marco de la pandemia, recalcó el representante permanente alterno de la isla ante la ONU.
Además, añadió, mi país es el único de América Latina que desarrolló vacunas propias contra la Covid-19, con más de 34 millones de dosis administradas, como paso indispensable para controlar la propagación del virus e iniciar la recuperación frente a la pandemia.
De una población de poco más de 11 millones de habitantes, 9,8 millones de personas ya fueron vacunadas y 5,3 millones recibieron una dosis de refuerzo, puntualizó.
Cuba también fue el primer país en contar con un programa masivo de vacunación antiCovid-19 para niños de dos años en adelante, subrayó Romero.
Igualmente, desde el inicio de la pandemia, el gobierno cubano implementó diversas medidas en materia laboral, salarial, tributaria y de seguridad y asistencia social para proteger a los sectores más vulnerables de la población, a fin de que nadie quedara desamparado, apuntó.
A pesar de la pandemia, la isla fortalece sus programas de atención a la niñez, los jóvenes, las personas con discapacidad y los adultos mayores, señaló el embajador.
Del mismo modo, continuó, diversifica las fuentes de empleo y perfecciona las instituciones encargadas de brindar servicios públicos de calidad al pueblo.
Por otro lado, se sigue avanzando en los programas de construcción de viviendas y se da un fuerte impulso a la reanimación y el desarrollo local de comunidades y barrios vulnerables, expuso.
«Todo ello sería mucho menos difícil y costoso, y podrían alcanzarse resultados superiores, si Cuba no tuviera que vivir bajo una política de inmerecido castigo como la que representa el bloqueo de los Estados Unidos.»
El embajador cubano alertó, además, cómo los países en desarrollo enfrentan un mayor impacto de la pandemia de Covid-19 y cuentan con menos recursos para hacerle frente. (Tomado de PL)