La IV Cumbre Iberoamericana de Turismo Accesible concluyó hoy con la firma de la Declaración de La Habana, donde Cuba expresa pública y oficialmente su disposición de colaborar en todas las acciones que puedan conducir a un turismo verdaderamente accesible e inclusivo.
La cita fungió como cierre del evento, que sesionó desde el miércoles 15 de diciembre en el emblemático Hotel Nacional de Cuba, y sirvió como espacio para anunciar a Santo Domingo, en República Dominicana, como sede de la quinta edición de la Cumbre.
El evento contó con la presencia de Manuel Marrero Cruz, primer ministro de la República de Cuba, Juan Carlos García Granda, ministro de Turismo, directivos de otros ministerios, junto con representantes de organizaciones participantes.
Marrero Cruz aseveró que Cuba nunca ha puesto distinción para sus visitantes porque es vocación de la Revolución eliminar toda clase de diferencias, y declaró que la Cumbre reafirma ese deseo y compromete a la nación a trabajar en favor de un turismo con igualdad de oportunidades para todas las personas.
El Primer Ministro además aprovechó el espacio para condenar la guerra mediática instigada por los Estados Unidos, particularmente las recientes campañas en las redes con el objetivo de desacreditar la calidad de la experiencia turística en Cuba y los protocolos sanitarios establecidos en correspondencia con la apertura de fronteras.
Durante la ceremonia, el presidente de la Red Iberoamericana de Turismo Accesible, Diego Javier González, entregó sendos reconocimientos a Arona, destino turístico perteneciente a la isla de Tenerife en España, y al Hotel Nacional de Cuba, por su labor constante de inclusión, el perfeccionamiento de sus instalaciones y el compromiso del personal con la calidad del servicio.
(Tomado de ACN)