Razones multiplicadas a favor de la Revolución

Trabajadores holguineros de todos los sectores multiplican sus voces en mítines de reafirmación revolucionaria para manifestar su respaldo a las ideas expresadas en el editorial del periódico Granma La razón es nuestro escudo y dejar bien claro su repudio a los intentos desestabilizadores de la contrarrevolución.

A lo largo de la jornada de este jueves, desde varios centros laborales de la oriental provincia se amplificó el sentir revolucionario de la masa obrera, que por más de 60 años ha fundado con sus manos obras de invaluable valor social y humanista.

Esa voluntad de defender al país de quienes intentan destruir la tranquilidad ciudadana y socavar al gobierno cubano fue patentizada con fuerzas en la Empresa de Industrias Locales Varias de Holguín, donde ante la presencia de María Dolores Domínguez, secretaria del Sindicato Provincial de Industrias, los trabajadores resaltaron que están dispuestos a defender al país, sobre todo trabajando con calidad.

Así lo reafirmó particularmente Raquelina Castillo Feria, secretaria general del Buró Extraterritorial de Industrias Locales, quien expresó que los trabajadores de industrias no se dejarán coaccionar por los grupúsculos contrarrevolucionarios y continuarán imprimiéndole calidad a su quehacer diario para impulsar al país en medio de un contexto sumamente complejo.

Igual decisión mostraron los trabajadores de la Empresa de Bebidas y Refrescos Pedro Díaz Coello, en donde se respaldó el documento publicado por el diario Granma y se patentizó que, como en ese medio se expuso, la dignidad, la resistencia y la unidad son las fuerzas más poderosas frente al enemigo.

Durante los siguientes días, a lo largo y ancho de Holguín se continuarán realizando matutinos especiales en los que se dejará bien claro que: «No existe en nuestro país el derecho a obrar a favor de los intereses de una potencia extranjera y a poner en riesgo la estabilidad ciudadana. Es anticonstitucional, ilegítimo, inmoral, adscribirse a un proyecto anexionista. Lo dicen nuestras leyes y lo dice nuestra historia».