“Las cubanas y los cubanos, en estas horas de prueba, se enfrentan al doble desafío del pico pandémico y del pico del bloqueo. La resistencia creativa, lo que seamos capaces de avanzar a partir de nuestros propios esfuerzos y la dignidad son nuestros escudos.”
Así lo evocó el Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez en el Encuentro Virtual Internacional Fidel, un hombre de ciencia con visión de futuro, realizado en ocasión del cumpleaños 95 del Líder Histórico de la Revolución.
Hoy, esa sentencia toma forma material en las muestras de unidad que cotidianamente dan nuestro pueblo y los trabajadores, estatales y privados, en el enfrentamiento a la COVID-19.
Y Leobanys Ávila Góngora, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba en la oriental provincia de Las Tunas, pondera cómo los afiliados de ambos sectores se han sumado al acompañamiento del personal de la Salud en la batalla por la vida que libran en la primera línea de combate.
El dirigente obrero destaca que sus expresiones de solidaridad son tangibles tanto a hospitales como a policlínicos y centros de aislamientos, “y lo hacen de forma altruista, enfatiza, con donaciones de recursos e insumos para el aseo personal, medios de protección individual y material de oficina”.
Refiere, además, que otros han puesto al servicio de la Salud sus medios de transporte privado en función del traslado de pacientes y de recursos y muchos campesinos aportan a esas instalaciones alimentos: viandas, hortalizas, carne de res y otros productos que complementan la dieta de los enfermos y sospechosos ingresados.
Con protagonistas…
Ávila Góngora hizo las declaraciones tras la entrega de un donativo de la sección sindical de tenedores de libros y de un afiliado de las actividades de mecanografía, rótulos, cifrados y grabados, quienes llegaron con su carga de amor hasta el policlínico docente Manuel Piti Fajardo Rivero, cuyos trabajadores se crecen en el enfrentamiento a la pandemia después de más de un año de infatigables faenas.
Arsenio Garcés López, tenedor de libros y secretario general de la sección sindical mencionada, cita nombres: Solángel Delgado, Eloy González, Manuel Quesada Pérez y Yadira Tristá; y, da el argumento: “Nosotros somos un grupo muy unidos y vimos la necesidad que tiene el país en este momento y la crisis económica agravada con el recrudecimiento del bloqueo norteamericano y la pandemia; entonces, decidimos compartir lo que tenemos en nuestras casas con los médicos y enfermeros que con tanta entrega hacen este sensible trabajo”.
En tanto, Carlos Manuel Ramos Sevila, de las actividades de mecanografía, rótulos, cifrados y grabados, confirma: “Llego al policlínico a ratificar mi condición de patriota. Este lema que llevan las caretas salió de mi corazón y es mi amor por Cuba lo que me motiva a apoyarlos en la lucha contra esta mortal enfermedad”.
Después de las emotivas palabras de los donantes, la doctora Elizabeth Reyes Suárez, directora del centro; y, su colega Adriel Carballo Peraza, especialista en primer grado en Medicina General Integral, recibieron medicamentos, lapiceros, artículos de aseo personal, máscaras faciales y cinco mil modelos para encuestas a paciente; y, agradecieron en nombre del colectivo el gesto altruista de sus coterráneos.
Epílogo
En la despedida, Ávila Góngora califica el humanitario gesto como “fruto de la obra de la Revolución y los valores inculcados y compartidos, que hacen posible que todo el pueblo esté dando lo mejor de sí para juntos ganar la batalla a la COVID-19”.
A esta emblemática instalación sanitaria, ubicada en el centro histórico de la ciudad de Las Tunas, ya han hecho acto de presencia con similar objetivo productores vendedores de artículos varios y transportistas privados todos conscientes de que juntos todo es posible.