La alta y lamentable cifra de fallecidos expresa la reciente gravedad de los contagios de la Covid-19, que ahora, sin asomo de optimismo vemos que va, despacito, hacia la bajada. Pero cuidado, siempre los descensos son peligrosos, hay que extremar las medidas de precaución para que no nos sorprendan las curvas.
Ese fue el sentir de la conferencia de prensa del Minsap de este jueves, 2 de septiembre, cuando la cifra de contagiados se mantiene ligeramente por encima de los 6 mil casos, bastante menor que una semana atrás y ya van seis días en el entorno de este número.
Algunas provincias tienden a controlar la transmisión, pero otras aumentan los casos como Cienfuegos (donde circula la muy agresiva cepa Delta del virus), Pinar del Río, Mayabeque, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y Artemisa, que tienen las mayores cifras de contagios.
Septiembre se vislumbra promisorio, pero a pesar de los esquemas de vacunación y el aumento de cubanos que ya tienen las tres dosis aplicadas (34,9 % de la población), el Doctor Durán aconseja: “Mucha protección”.
En el caso de los menores de 18 años, un segmento de la conferencia habló de las medidas de protección y aconsejó sobre el cuidado, específicamente de los niños entre 0 y 6 años de vida.
“El riesgo depende del comportamiento de la familia”, advirtió la doctora Susett Pérez Parra, Jefa de la Oficina de Promoción de Salud (Prosalud), quien especificó que “no solo el beso expresa afectos”, por lo que aconsejó “cambiar las dinámicas familiares, porque mientras mejor cuidado y alimentados estén los niños, estarán en condiciones más favorables para sortear los embates de la enfermedad”.
Insistió en que los niños deben mantener las consultas y los esquemas de vacunación; solo para eso será necesario salir de casa. Los bebés tienen que mantenerse en su habitación y bajo ningún concepto recibir visitas. Los padres deben usar nasobuco durante la manipulación de los infantes, incluso a la hora de lactar.
Sobre el uso del nasobuco en los niños de un año y un poco más, alertó tener mucho cuidado y vigilancia, pues generalmente los tocan, se los quitan, se humedecen. “Deben estar limpios, de lo contrario no son beneficiosos».
“Modificar los comportamientos de la familia suele ser incómodo, pero es absolutamente necesario”, y citó a algunas personas que se quejan por ello.
Se preguntó si alguien imaginaba que estaríamos 18 meses usando nasobuco, con tanto tiempo de teletrabajo, sin acudir a actividades sociales y afectivas, pero la pandemia nos ha obligado.