«No puede permitirse a una superpotencia destruir países pequeños para imponer su dominación». Así inició su intervención el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, durante la XXI Reunión de Cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), efectuada este sábado en México, país que preside en estos momentos la organización.
Rodríguez Parrilla denunció que, de forma deliberada y cruel, el gobierno del Presidente Donald Trump identificó la COVID-19 como una oportunidad para reforzar el bloqueo genocida y la agresión contra Cuba y que esa política es aplicada hoy por el Presidente Joseph Biden, amenazando la integridad del pueblo cubano.
«La campaña de descrédito, financiada con fondos federales de los Estados Unidos y del gobierno de la Florida, utilizó una plataforma tóxica para, con mentiras y tergiversaciones, incitar desórdenes y violencia que justificaran una intervención. No hubo estallido social y el pueblo cubano, de forma contundente, rechazó y derrotó la intentona con la unidad y el consenso ampliamente mayoritario de los ciudadanos», señaló el jefe de la diplomacia cubana.
Agradeció las múltiples muestras de apoyo y solidaridad, y de condena al bloqueo y reafirmó que el pueblo cubano y su Gobierno defenderán el Estado Socialista de Derecho y Justicia Social, y persistirán en la construcción de una Nación independiente, soberana, socialista, democrática, próspera y sostenible.
La campaña de descrédito, financiada con fondos federales EEUU y de la Florida, utilizó una plataforma tóxica para, con mentiras y tergiversaciones, incitar desórdenes y violencia q justificaran intervención.
No hubo estallido social. El pueblo🇨🇺 derrotó la intentona con unidad. pic.twitter.com/p6wkLgcaIk
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) July 24, 2021
Bruno Rodríguez Parrilla hizo un importante llamado: «Luchemos todos por cambiar y democratizar el orden internacional».
Al finalizar, agradeció las palabras del presidente Andrés Manuel López Obrador por su trascendental discurso en esta jornada y a México, por su liderazgo y solidaridad. Ratificó el compromiso invariable de Cuba con la integración regional, y con la condición de la América Latina y el Caribe como Zona de Paz.
«Fieles al legado emancipador del Libertador Simón Bolívar, preservemos la unidad en la diversidad y aunemos esfuerzos para consolidar la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños», concluyó.