El 11 de julio de 2010, Andrés Iniesta anotó el gol en la final del Mundial de Sudáfrica para darle el título a la selección española en la prórroga ante Países Bajos.
“Cuando el pase me viene de Cesc escuché el silencio, como que estaba solo con el balón. Y en mi cabeza, estaba que entrase como fuese: había sido un partido durísimo, muy igualado, con ocasiones para ambos equipos. Y cuando estás tocando los penaltis… Gracias a Dios todo acabó mucho antes, con la celebración, con la camiseta de Dani. Un momento brutal a nivel personal porque no había tenido un gran año: fue volver a nacer futbolísticamente. A nivel personal atravesé situaciones muy complicadas, tuve muchas lesiones. Pero todo acabó como acabó”, dijo Iniesta a Ibai Llanos.
(Con información de Mundo Deportivo)