Los bajos niveles operacionales de la industria de ocio en Varadero y su impacto en la reducción de los empleos como consecuencia de la COVID-19, no mermó el sentido altruista de los hombres y mujeres de este sector, que acaba de cumplir con el monto comprometido de Mi Aporte a la Patria correspondiente al 2021.
Fruto de la contribución voluntaria de estatales, no estatales y jubilados, las tres fuentes de afiliación, la cantidad entregada supera los 250 mil pesos, cifra obtenida gracias a quienes honraron lo prometido y en no pocos casos lo superaron.
María Caridad Rodríguez Ortega, secretaria general del Sindicato Municipal de Trabajadores de la Hotelería y el Turismo (SMTHT) en Cárdenas, ponderó a los afiliados de los centros laborales de Varadero, por “una vez más demostrar que nada, ni siquiera las adversidades, pueden detenerlos”, resaltó.
“Nuestro agradecimiento a ellos, a los directivos sindicales y administrativos por hacer posible este empeño en difíciles circunstancias, lo que refuerza la valía de lo hecho por ustedes”, significó.
Rodríguez Ortega mencionó a los hoteles Internacional, Sol Palmeras, Royalton Hicacos, Blau Varadero, Brisas del Caribe y el complejo Villa Cuba-Las Morlas, sobresalientes tanto por la suma ofrecida como por la prontitud con que lo hicieron.
Tras conocer del cumplimiento, Víctor Manuel Lemagne Sánchez, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Hotelería y el Turismo, felicitó en su cuenta de facebook a los representantes del SMTHT en Cárdenas y a sus afiliados. “Ustedes están haciendo historia. Seguimos en combate”, reconoció.
Osmar Ramírez Ramírez, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba en esta occidental provincia, significó un gesto que cobra mayor valía en momentos en los que el país vive una batalla sin tregua para derrotar la COVID-19”.
Ramírez Ramírez recordó que el dinero de Mi Aporte a la Patria se emplea, entre otros usos, en la sufragación de parte de los gastos de la preparación para la defensa territorial, la realización de ejercicios militares, y movilizaciones de la Defensa Civil ante inminentes azotes de fenómenos hidrometeorológicos y sanitarios como este que sucede ahora con el SARS-CoV- 2.
El año pasado Matanzas estuvo entre las tres primeras provincias en satisfacer su compromiso con este deber sagrado, posición alcanzada junto con Ciego de Ávila y Santiago de Cuba.