Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) al intervenir hoy en la 109 Conferencia Internacional del Trabajo dijo que el gobierno cubano aprobó de conjunto con Empleadores y Sindicatos protocolos sanitarios para enfrentar la COVID-19 y sus efectos en el escenario laboral.
El también miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba explicó en la reunión (virtual) que esas acciones se han ejecutado siendo coherente con los principios del proyecto social que se construye en su país bloqueado unilateralmente por el gobierno de Estados Unidos.
En nombre de la CTC y los sindicatos que la integran, denunció que la guerra económica se ha recrudecido con 240 nuevas medidas cuya implementación han sido precisamente durante los embates de la pandemia.
Del 7 al 19 de junio, representantes de los gobiernos, trabajadores y empresarios de los 187 Estados Miembros de la OIT se reúnen en línea para debatir cuestiones relacionadas con el mundo del trabajo, incluida una recuperación centrada en las personas después de la pandemia.
La Cumbre sobre el Mundo del Trabajo de la OIT forma parte de la Conferencia Internacional del Trabajo. La Cumbre de este año, que tendrá lugar durante dos días (17 y 18 de junio), se centrará en la respuesta a las devastadoras consecuencias humanas de la COVID-19 y en las medidas necesarias para construir un futuro del trabajo mejor.
Intervención del compañero Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la CTC en la 109 Conferencia Internacional del Trabajo, que se celebra de forma virtual
Señor Presidente:
Distinguidos Delegados:
Hablo en nombre de la Central de Trabajadores de Cuba y los 15 sindicatos nacionales que la integran, aprovecho la ocasión para trasladarle nuestro fraternal saludo.
La declaración del Centenario de la OIT constituye una respuesta política y práctica a sus mandantes, para continuar construyendo un futuro del trabajo centrado en las personas. Dos años después el mundo vive, ocasionado por la COVID-19, una crisis sin precedentes, con impactos en los ámbitos sanitario, económico, social y el mundo del trabajo.
La memoria del Director General reconoce que esta pandemia ha provocado que más de tres millones de personas hayan perdido la vida, al mismo tiempo se eliminaron 255 millones de puestos de trabajo a jornada completa, y 81 millones abandonaron el mercado laboral permaneciendo inactivos, a lo que se suma que 108 millones de trabajadores viven en una situación de extrema pobreza.
En medio de este adverso escenario global, acapara la atención sus devastadoras consecuencias, la exacerbación de desigualdades y políticas discriminatorias para los trabajadores informales, los migrantes, las mujeres y en especial los jóvenes, que enfrentan un panorama sombrío para incorporarse al mercado laboral. Ello impone el desafío de promover la recuperación desde una acción concertada que logre articular el justo equilibrio de superar la contracción de la economía y preservar la seguridad, la salud, así como las garantías y prestaciones sociales de los trabajadores.
Cuba, sufre un criminal bloqueo económico, comercial y financiero que nos impone unilateralmente el gobierno de los Estados Unidos hace más de seis décadas, recrudecido con la aplicación de 240 nuevas medidas. No obstante, siendo coherentes con los principios del proyecto social que construimos, el gobierno aprobó de conjunto con Empleadores y Sindicatos protocolos sanitarios para enfrentar esta terrible pandemia y sus efectos en el escenario laboral del país.
Cientos de miles de trabajadores han sido reubicados en otras actividades ante la paralización de su sector, entre los más significativos el turismo, el transporte, comercio y el artístico, así como los trabajadores por cuenta propia los que han recibido mayoritariamente protecciones salariales o incentivos fiscales. Del mismo modo se ha multiplicado la utilización del teletrabajo y el trabajo a distancia, además de la adopción de medidas para proteger a la mujer trabajadora.
Señor Presidente:
Cuba, enarboló nuevamente las banderas de la solidaridad y afiliados del sector de la salud pública en composición de brigadas médicas, las que combatieron y todavía enfrentan la COVID–19 en más de cuarenta países demostrando con resultados su elevada competencia profesional. Así mismo, nuestros científicos han desarrollado cinco candidatos vacunales que permitirán inmunizar a la población antes que concluya el presente año.
Hoy como nunca antes se hace urgente unir esfuerzos y voluntades a favor de la especie humana para configurar un futuro del trabajo con justicia social y trabajo decente para todos.
Muchas gracias.