Cuando el escenario epidemiológico del país a consecuencia del impacto de la COVID-19 se pronostica como desfavorable para las próximas semanas, expertos y científicos ratifican la validez de continuar acompañando la intervención sanitaria de los candidatos vacunales en la población con medidas restrictivas y el riguroso cumplimiento de las indicaciones contenidas en el plan de enfrentamiento a la enfermedad en cada territorio.
Reunidos con el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez expusieron un diagnóstico de la actual situación sanitaria en el país, y acciones que pudieran cortar la transmisión, así como las cifras de pacientes críticos y graves.
El Doctor en Ciencias, Raúl Guinovart, Decano de la Facultad de Matemática y Computación de la Universidad de La Habana, manifestó que pese a la disminución del número de contagios en la capital, la situación pudiera empeorar si no se observan las medidas establecidas en orden de bioseguridad, al tiempo que pronosticó un escenario complejo en las restantes provincias del país.
«El éxito de esta batalla está en la combinación de todas las medidas», acotó.
Un análisis comparativo en dos momentos: los meses de Enero a Marzo y de Abril a Mayo confirma el incremento de la severidad de la enfermedad, evidenciado por un alza del número de pacientes en estado grave durante el quinto mes del año y también de una mayor tasa de incidencia, argumentó la Doctora en Ciencias Lisette Sánchez Valdés, también en el incremento de los fallecidos durante el último mes.
El Ministerio de Salud Pública trabaja en un nuevo protocolo general de atención a los pacientes con COVID-19. Particularmente, durante la reunión con nuestro presidente, donde además participó el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz, se expusieron detalles de este protocolo, asociado a la atención de pacientes graves y críticos, considerando esencial el ingreso precoz, la clasificación oportuna y el tratamiento temprano de cada paciente, aseveró el Doctor Frank Daniel Martos Benítez, médico intensivista.
El nuevo protocolo es innovador y se sustenta en investigaciones científicas y la experiencia de nuestros médicos durante el combate a la pandemia, tiene una visión integral y contempla una atención personalizada a cada paciente, el incremento de la vigilancia, la intervención terapéutica especializada y estrategias ajustadas a la gravedad del cuadro clínico, entre otros.
El mandatario significó que, ante el incremento de la incidencia de la enfermedad y la contracción de los plazos para la atención a los pacientes que avanzan hacia estados graves o críticos, se imponen nuevos retos.
Puntualizó la importancia de actuar con rigor y responsabilidad ante un escenario epidemiológico complejo. Dijo que ante ese pronóstico, el cumplimiento de las medidas en un momento de intervención sanitaria en la población, para que de conjunto esto vaya teniendo un mayor efecto frente a la pandemia, es muy importante. «Por lo tanto se confirma que el comportamiento, el cumplimiento de las medidas y la responsabilidad personal, comunitaria, familiar, social, se imponen», reafirmó.
El Primer Secretario del Comité Central del Partido ponderó la respuesta que ha dado el personal de la salud ante un escenario tan adverso, e hizo un nuevo llamado a no confiarnos.
En la propia jornada, varias provincias del país intervinieron en la reunión del Grupo Temporal de Trabajo, encabezada por nuestro Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, teniendo en cuenta la complejidad del escenario epidemiológico actual por el impacto de la COVID-19.
El Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, retomó la necesidad de cumplir las medidas del plan de enfrentamiento a la COVID-19 en cada provincia y territorio, sin improvisación, teniendo en cuenta el pronóstico de expertos y científicos para las próximas semanas.
«No podemos ganar esta batalla esperando qué se dice desde la provincia, lo más importante es fortalecer los municipios, es velar porque los municipios estén funcionando bien», puntualizó el Primer Ministro.
Altas cifras de contagios, de pacientes críticos y graves, de incremento en la movilidad de las personas y dispersión del virus marcan el escenario epidemiológico, lo que implica elevar la percepción de riesgo y la responsabilidad comunitaria y familiar para acompañar los esfuerzos de nuestros científicos en el proceso de intervención sanitaria con nuestros candidatos vacunales. (Demetrio Villaurrutia)