El deporte para personas con discapacidad planea mantener su ritmo ganador en Tokio 2020. La idea de las máximas autoridades de esa área del movimiento atlético cubano es tratar de inscribir en la lid de los cinco aros al menos 30 representantes, cifra superior a la que se inscribió en Río de Janeiro 2016 (26).
En medio de los embates de la Covid 19, las máximas autoridades del deporte en la Isla diseñaron una estrategia que debe rendir beneficios. Los últimos en inscribirse en esa empresa son los parajudocas José Manuel Romero (66 kg), Gerardo Rodríguez (81), Isao Cruz (100) y Yordani Fernández (+100), y Sheyla Hernández (70), quienes por estas fechas se alistan en Europa con un objetivo común: asegurar sus pasaportes a la lid paralímpica.
Los torneos que podrían certificarles las unidades necesarias para aspirar a ese sueño serán los Grand Prix, de Bakú los días 25 y 26 de mayo, y el de Birmingham pactado entre el 19 y el 20 de junio.
Cuba tiene ya confirmados para Tokio 2020 a Omara Durán, Ulicer Aguilera (parajabalinista), Lorenzo Pérez, y el tenista de mesa Yunier Fernández.
El deporte para personas con discapacidad en nuestro país ha logrado muy buenos resultados en citas mundiales, parapanamericanas y paralímpicas. Ojalá Tokio 2020 sea la confirmación de esas conquistas.