Concretar el programa de autoabastecimiento municipal y los planes de desarrollo agrícola hasta el 2030, en medio de frustraciones de sequía, escasez provocada por la COVID-19, el recrudecimiento del bloqueo y limitaciones de fertilizantes y otros recursos desafía a los agropecuarios en Guantánamo.
Según información de Rodny Alcolea, funcionario de Comunicación en el gobierno, la anterior reflexión desencadenó en reciente encuentro de trabajo, con la presencia de representantes de ese sector con autoridades gubernamentales en la provincia, donde es proyección «incrementar las producciones y ofertas, con la aplicación de la ciencia y el empleo de tecnologías que permitan dinamizar la agricultura».
En el encuentro Diosnel Sanloy Martínez, Delegado del ramo en el territorio, expuso las prioridades para el año y argumentó que «se trabaja en el incremento de la producción de fertilizantes y semillas de calidad, el mejoramiento de los suelos, la genética y sanidad animal, la introducción en lo posible de más mecanización, y el aumento de las áreas bajo riego y de minindustrias».
Lo anterior resulta aún más decisivo en medio de un contexto ya estudiado por la delegación del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), cuyos informes detallan la necesaria elevación del nivel tecnológico de los productores, el mejoramiento de la calidad y nivel de vida del poblador serrano, el fomento de plantaciones con semillas de calidad y una mejor estrategia fitosanitaria con el uso de abonos y productos orgánicos.
De ahí que los agropecuarios empeñan tiempo y vida en un tema que ayer no parecía tan urgente como la explotación correcta de la tierra con la diversificación y empleo de bioproductos en pos de la siembra de más hectáreas de plátanos, yuca, boniato, malanga y frutales, el aumento de los módulos pecuarios, y por consiguiente el perfeccionamiento de los mecanismos de contratación y comercialización que —más allá de la aspiración de 30 libras per cárpita de viandas y hortalizas por consumidor— satisfagan la demanda de la población.
Entre las proyecciones de los directivos de la Agricultura en el Alto Oriente cubano están los programas para elevar los rendimientos de la apicultura y mayores avances de la actividad porcina, con el aumento de cerdos de capa negra.
Asimismo, la Empresa Procesadora de Café Asdrúbal López, expuso los avances del polo exportador Alto Serra, que prevé este año arrancar la exportación por vez primera de 10 toneladas de jengibre (zingiber officinale) al mercado ruso.