Las olas de calor que se registran periódicamente en el sur de Asia incrementarán su intensidad en un futuro cercano debido al avance del calentamiento que padece el planeta, lo cual afectará gravemente una región donde reside casi la cuarta parte de la población mundial, según ha revelado un nuevo estudio científico.
De acuerdo con la investigación, un incremento de la temperatura global en 2 grados Celsius (°C) triplicaría la exposición de la población al estrés por calor, lo que implicaría para sus integrantes consecuencias mortales.
Limitar el calentamiento a 1,5 °C probablemente reducirá ese impacto a la mitad, pero de todas maneras el estrés por calor mortal se convertirá en algo común en el sur de Asia, señala el estudio, realizado por el Laboratorio Nacional de Oak Ridge, en Estados Unidos, y publicado recientemente en la revista especializada de ese país Geophysical Research Letters.
Las personas que viven en el sur de Asia son especialmente vulnerables a las olas de calor mortales porque el área ya experimenta veranos muy calurosos y húmedos. Gran parte de la población vive en ciudades densamente pobladas sin acceso regular al aire acondicionado, y alrededor del 60 % realiza trabajos agrícolas y no puede escapar del calor.
Para esta investigación, los autores utilizaron simulaciones climáticas y proyecciones del futuro crecimiento de la población, a fin de estimar el número de personas que experimentarán niveles peligrosos de estrés por calor a niveles de un calentamiento de 1,5 y 2 °C en esa zona de Asia.
De tal manera, estimaron que los residentes experimentarán la denominada temperatura de bulbo húmedo, una categoría que considera los 32 °C como el punto en el que el trabajo a la intemperie se vuelve inseguro, y 35 °C como el límite para la supervivencia humana, cuando el cuerpo ya no puede enfriarse.
El análisis de los resultados obtenidos sugiere que de subir el calentamiento 2 °C, la exposición de la población a temperaturas laborales inseguras aumentará más del doble, y la exposición a temperaturas letales aumentará 2,7 veces, en comparación con años recientes.
La comunidad científica del orbe coincide en afirmar que la Tierra se ha calentado ya en al menos 1 °C desde el inicio de la Revolución Industrial. El Acuerdo de París contra el Cambio Climático, adoptado en el 2015, estableció para finales del presente siglo limitar el alza de las temperaturas a 2 °C, y hacer el esfuerzo por reducir el aumento a 1,5 grados.
Sin embargo, la Organización de Naciones Unidas ha advertido reiteradamente que las medidas y los compromisos adoptados hasta el presente por la comunidad internacional resultan insuficientes para alcanzar los objetivos trazados por el Acuerdo de París. Expertos alertan que en la trayectoria climática actual, el calentamiento del planeta puede alcanzar 1,5 °C en el 2040, plazo que deja poco tiempo para que los países se adapten, en particular los surasiáticos.
La presente investigación estuvo centrada en el sur de Asia, como la región geográfica donde las olas de calor causarán mayores estragos en la población mundial; pero también confirma lo pronosticado por estudios divulgados anteriormente, según los cuales el cambio climático genera en todo el planeta el incremento en la frecuencia, intensidad y duración de las olas de calor, y relacionan el alza de las temperaturas con un incremento de la mortalidad.
Ante la creciente amenaza, el actual equipo de investigadores reiteró la necesidad de abordar la problemática del cambio climático con la urgencia y determinación que las circunstancias requieren.
«Solo un aumento de medio grado a partir de hoy provocará un incremento generalizado de estos eventos (las olas de calor)», afirmó en un comunicado Moetasim Ashfaq, científico del clima computacional del Laboratorio Nacional de Oak Ridge y autor correspondiente del estudio.
“El futuro se ve mal para el sur de Asia; pero lo peor puede evitarse conteniendo el calentamiento lo más bajo posible», añadió Ashfaq; y enfatizó el destacado investigador: «La necesidad de adaptación en el sur de Asia es hoy, no en el futuro. Ya no es una elección».
(Con información de páginas web Cambio Climático y Milenio)