Julio Morales Verea, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en Villa Clara, consideró que la actualización del Convenio Colectivo de Trabajo (CCT), ejercicio anual que tiene lugar en los centros laborales, y que se establece entre el sindicato, la administración y los trabajadores, tiene en esta ocasión importancia medular.
Según afirmó, este momento es decisivo para que el documento se adapte a los tiempos actuales y funcione como consulta y guía, sea capaz de materializar el Código del Trabajo en las circunstancias complejas en que se encuentran las entidades, a la luz de las condiciones impuestas por la COVID-19, el bloqueo y la implementación de la Tarea Ordenamiento.
“Resulta imprescindible la actualización del CCT, establecer la ley del colectivo laboral a partir de las modificaciones y adecuaciones del nuevo entorno en que se desarrollan los procesos productivos y de servicios”, puntualizó.
“La participación de los trabajadores se hará por diversas vías y cada cual tendrá la oportunidad de expresar sus opiniones e inquietudes. Cada colectivo establecerá su fórmula para que esto suceda”, precisó.
El debate en Villa Clara se inició el pasado 1ro de marzo y se extenderá hasta el 30 de abril, involucra más de 200 mil afiliados del sector estatal y no estatales. Las entidades que avanzan son de los sindicatos de Comunicaciones, específicamente Etecsa, la Construcción y la Industria Alimentaria.
Según detalló, las temáticas más tratadas en el proceso están relacionadas con los reajustes económicos, gastos y proyecciones, así como la determinación de cargos, áreas de labor y medios técnicos asignados a los contratos suscritos, como parte de las nuevas formas de trabajo a distancia o teletrabajo.
Por otra parte, el máximo dirigente de la CTC en Villa Clara insistió que asuntos de la Tarea Ordenamiento deben ser incluidos, entre ellos mencionó las medidas dispuestas para el desarrollo de la empresa estatal socialista, las exportaciones de bienes y servicios, los beneficios de las empresas exportadoras en las ventas en fronteras hacia la Zona Especial de Desarrollo Mariel, y las relaciones comerciales con el Turismo, el encadenamiento productivo cuando sea viable la inserción de los sectores estatal y no estatal de la economía.
Es decir, todas las medidas establecidas para lograr eficiencia y que permitan obtener utilidades para desarrollar la empresa y generar ingresos que se reviertan en incrementos salariales, agregó.