El egipcio Mohamed Salah fue preconvocado por su selección para integrar el equipo a los Juegos Olímpicos de Tokio, un hecho que tomó por sorpresa al Liverpool.
El equipo de Anfield desconocía las intenciones del combinado africano de contar con su estrella, que de ir a la cita olímpica vería alterada su preparación del curso siguiente e incluso podría perderse el inicio de la temporada.
(Con información de Mundo Deportivo)