Contener la dispersión de la Covid-19 en el territorio guantanamero es un imperativo. Máxime en este tercer mes del rebrote en esa oriental provincia cubana, con indicadores de la enfermedad realmente alarmantes.
En ese contexto supone un desafío creciente gestionar la actividad de la enseñanza en una provincia cuya excelencia educativa la ubica por más de un lustro entre las mejores del país.
Para obtener información al respecto Trabajadores entrevistó a Raquel Laviste Villafruela, directora provincial de Educación en Guantánamo.
-Al decretarse en el territorio la fase de Transmisión Autóctona Limitada ¿Cuál ha sido la estrategia para asegurar la continuidad de estudios en todos los niveles de enseñanza?
-“El hecho de que en ninguna de las 779 instituciones educacionales que funcionan en la provincia se hayan producido focos de contagio evidencia que se ha trabajado intensamente en el cumplimiento de los protocolos de salud; se ha actuado, además, con máxima responsabilidad.
“Logramos, asimismo, asegurar los recursos indispensables para el cumplimiento de los protocolos establecidos referidos a mantener la higiene y limpieza en cada una de las instituciones.
“En este período nos hemos dedicado a organizar la continuidad del proceso docente-educativo en las comunidades. Conseguimos crear las condiciones para que los padres estén al tanto de las actividades televisivas dirigidas a los estudiantes y docentes e igualmente para que aquellos que no tengan las condiciones en sus hogares, visualicen esas actividades.
“Se han grabado las teleclases para que todos los estudiantes y familias dispongan de ellas; especialmente para llevarlas hasta las comunidades intrincadas y las serranías.
“A su vez, mantenemos la producción de alimentos en nuestras áreas de autoabstecimiento, lo cual es muy significativo pues esas producciones tienen como destino fundamental el consumo de los 27 círculos infantiles que están funcionando, los 2 hogares de niños sin amparo familiar, 10 seminternados y los que funcionan como centros de aislamiento.
“De igual manera, activamos grupos en la red social WhatsApp entre estudiantes y docentes para el intercambio de saberes. El rol de los docentes y educadores en esta etapa ha estado centrado en la autosuperación y preparación de los sistemas de clases para cuando se reinicie el curso escolar trabajar con los alumnos a partir del diagnóstico.
“Continúan activados los equipos de guardia obrera y de trabajo para controlar y cuidar los recursos de las instituciones.
“Por otra parte, ha sido significativo el aporte que muchos docentes ofrecen en los centros de aislamiento, uniéndose a las brigadas de voluntarios que están en primera línea de trabajo.
«Los educadores han hecho suya la batalla contra la Covid-19, no sólo en la exigencia personal y a sus alumnos, sino también en el trabajo persuasivo con la familia y la comunidad».
-¿Cómo hacen para lograr que las iniciativas de educación lleguen a todos los estudiantes?
-“Nuestros directivos, educadores, maestros y profesores están en contacto directo con las familias para orientarlas en cómo deben apoyar para que sus hijos cumplan con las orientaciones que se les dan, especialmente en la visualización de las actividades docentes televisivas.
“A través de los programas del Telecentro, los metodólogos han orientado a toda la población sobre el horario de las actividades docentes que se transmiten por la televisión nacional. En las zonas de las montañas los directivos y docentes tienen organizado el trabajo educacional en función de garantizar que sus pares allí visualicen las actividades docentes televisivas en coordinación con las familias.
“Orientamos incluso el apoyo de la comunidad y los organismos a esta tarea, especialmente en la utilización de locales, como las salas de televisión, para reunir a los alumnos que no disponen de las condiciones en sus hogares para visualizar esas actividades.
“Hay que decir que la familia ha dado un loable apoyo y en casas con las condiciones requeridas varios alumnos visualizan las actividades trasmitidas por el canal educativo o las grabaciones que llevamos hasta comunidades intrincadas, donde hay zonas de silencio.
“Los estudiantes de las escuelas pedagógicas han contribuido en la atención de los centros de aislamiento, fundamentalmente desde sus propias escuelas, que se han convertido en instituciones para la atención de los pacientes.
“Están siendo utilizados como centros de aislamiento 10 de nuestros colectivos diseminados por los municipios donde más casos y controles de focos existen».
-¿Cuáles son los retos del sector en la provincia?
-“Como ya se ha dicho, el objetivo de los sistemas educativos debe ser recuperarnos. Nuestro ministerio ha sido claro en la necesidad de asumir los nuevos retos en el enfrentamiento a la pandemia, de ahí que nuestro accionar contribuya a revertir la actual situación epidemiológica, cuidar la salud de educadores y educandos, lo cual pasa por una mayor responsabilidad de todos.
“La COVID-19 nos ha enseñado a prepararnos más y mejor, hacer ajustes curriculares y pensar una escuela diferente”, concluyó la directora de educación en la oriental provincia cubana de Guantánamo».