Nicaragua demanda respeto a su soberanía para seguir impulsando la Revolución

“Nadie puede pretender dirigir los destinos de otros pueblos o decidir por injerencia los destinos de una Patria como la nuestra, llena de fuerza de espíritu, cristiana y solidaria”. Así lo ha reiterado el presidente nicaragüense Daniel Ortega en los mensajes de inicio de año a la Nación y a las familias nicaragüenses, en los que ha denunciado  la injerencia de Estados Unidos y demandado respeto a la soberanía de los pueblos “que anhelan trabajar por el bienestar de sus ciudadanos, a través de diversos proyectos sociales”.

 

 

En un año electoral decisivo para la Revolución Sandinista y tras la salida de Donald Trump de la Casa Blanca –quien impuso sanciones unilaterales, dictó medidas y encabezó una guerra mediática sin precedentes contra el Gobierno de la nación centroamericana– Ortega reclamó con fuerza el derecho de su país a la autonomía, a decidir por sí mismo el camino a seguir y a continuar impulsando proyectos y programas de beneficio social mayoritario.

“Con el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional se ha logrado dar vida a comunidades que en el pasado no tuvieron condiciones dignas, como San Juan del Norte, espacio que ahora posee escuelas, centros de salud, abastecimiento de alimentos”, señaló el mandatario, y reconoció además que los programas impulsados en materia de salud, educación, deporte, ampliación de cobertura de agua potable y electricidad, construcción de caminos, puentes, aeropuertos y otros planes de desarrollo económico, han estado en el centro de atención de su gobierno.

Destacó también la importancia de los proyectos de construcción de viviendas, la  entrega de títulos de propiedades, la disminución de la pobreza y de los índices de violencia del país a niveles nunca antes alcanzados y que todos esos beneficios el pueblo los recibe y no se les pregunta “de qué partido son o por quién votaron, porque son nicaragüenses”. Lo mismo ocurre con los programas de prevención y atención a las familias, a las personas con alguna discapacidad, las casas maternas, las Comisarías de Mujer, a las mujeres víctimas de agresiones y violencia, y a los niños.

En los diferentes mensajes que cada semana emite el Gobierno sandinista a las familias, tanto el presidente como la vicepresidenta Rosario Murillo han recordado durante el mes de enero, el desafiante año 2020 para la humanidad debido a la pandemia de la COVID-19, que el país ha enfrentado con una organización y un trabajo integral, alcanzando resultados favorables. A eso se sumó los dos huracanas –Eta e Iota– que en apenas una semana atravesaron el país, pero la actuación de las fuerzas combinadas del Estado, las instituciones y las familias permitieron que ante situaciones tan complejas se brindara seguridad, protección  a todos y cada uno de los ciudadanos y a los más afectados se les ha garantizado posteriormente, donaciones recibidas gracias a la cooperación internacional.

A pesar de los intentos por seguir generando violencia y odio y las incesantes  amenazas internas y externas, Daniel Ortega dijo que se ha trabajado mucho para que no se destruya lo alcanzado y que no vuelvan a ocurrir episodios como los del 2018; de ahí que las prioridades para este año estén centradas en las familias: en primer lugar el combate a la pandemia, el aumento de la inversión pública, el gasto social y el aumento de la producción: mejoramiento genético, la masa bovina, los lácteos, la recuperación de la pesca, el acopio, la comercialización, los laboratorios de peces de agua dulce, la flota pesquera, entre otros planes para mejorar la calidad de vida de las familias, los granos básicos y hortalizas.

Un plan contra la pobreza, que tiene como objetivo su eliminación total, ha sido proyectado para este año, pero se necesita unidad, concordia, sentido de paz y bienestar. “Todos tenemos derecho al bienestar, a sentirnos dignos, a vivir con paz, en estos tiempos donde nuestro derecho supremo no lo puede quebrantar nadie”, reflexionó el Presidente nicaragüense.

“Es hora de que se respete el derecho que tenemos los nicaragüense a decidir nuestro destino, entre nicaragüenses, todos como gran familia y nuestro derecho a construir una unidad que ha experimentado fracturas promovidas por el imperio, pero una unidad que es propia, por el bien común que no tiene otro dueño que el pueblo nicaragüense”, subrayó.

 

[box title=»Logros principales de los 14 años de Revolución Sandinista» box_color=»#d90e1c» title_color=»#ffffff»]

• Reducción de la pobreza extrema y la desigualdad.
• Desconcentración de las riquezas y distribución social más justa y equitativa.
• Eliminación de la llamada autonomía escolar.
• Derecho constitucional a la salud y la educación gratuita y universal.
• Capacitación de maestros y reducción del empirismo.
• Aumento de la inversión en tecnología de punta como Internet de alta velocidad, aulas digitales y el Programa de la Merienda Escolar
• Mejoramiento de centros educativos: se han invertido 7 684.5 millones de córdobas (220 millones de dólares), propiciando entrega de merienda escolar y útiles escolares a más de 1 millón 200 mil estudiantes.
• Desarrollo de un modelo familiar y comunitario de salud con participación de 53 mil voluntarios: la red más grande este tipo en Centroamérica.
• De 22 mil trabajadores de la salud que encontró la Revolución Sandinista, en el 2020 ya se contaba con 37 mil.
• Un laboratorio de Biología Molecular nicaragüense tiene capacidad para producir 12 millones de vacunas contra la influenza en un año.
• Del 50 % que alcanzaba la cobertura eléctrica en el país en el 2006, hoy llega al 99 % del país.
• Nicaragua ocupa el quinto lugar en el mundo con mayor participación de las mujeres en la toma de decisiones del país.

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Fuente: La Voz del Sandinismo