El movimiento sindical en su accionar debe tener presente en estos momentos tres prioridades: la implementación de la Estrategia Económica- Social, la Tarea Ordenamiento y el proceso político de la presentación e información del Plan de la Economía y el Presupuesto para el 2021.
Así declaró a Trabajadores Milagro de la Caridad Pérez Caballero, miembro del Secretariado Nacional de la CTC, quien enfatizó que el proceso de presentación e información del Plan y Presupuesto será diferente este año, pues debe tenerse en cuenta la situación impuesta por la pandemia provocada por la COVID-19 y el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de los Estados Unidos contra Cuba.
“Estamos en condiciones de analizar en los colectivos laborales qué debe hacerse para favorecer el desarrollo y fortalecimiento de la industria, independientemente de las limitaciones con los recursos, así como la necesidad de incrementar los encadenamientos productivos, no solo hacia el interior del sector empresarial, sino también al exterior con el no estatal”, afirmó.
También estarán presentes la planificación territorial y municipal y otros elementos que deben abordarse de una manera diáfana, transparente y con el oído pegado a la tierra en las asambleas que se realizarán desde el 15 de enero y se extenderán durante los meses de febrero y marzo, agregó. Sobre las indicaciones de la desagregación y teniendo en cuenta el ordenamiento monetario se ha considerado que las inversiones se evalúen en las asambleas del mes de abril.
“Tenemos la satisfacción de que el movimiento sindical ha recibido en estos momentos difíciles que afronta el país respuestas a muchas de las demandas formuladas por los trabajadores, y esa es una motivación para responder y comprometernos con la producción, la eficiencia, el ahorro, la productividad, la calidad, y la implementación de las 43 medidas que dan mayor autonomía a la empresa estatal socialista, precisó.
En relación con la reforma salarial afirmó que existen inconformidades que se evalúan puntualmente, pero ante todo hay que pensar como país.
Subrayó que en las entidades existen reservas que deben explotarse. “Es trascendental el papel que deben desempeñar hoy los innovadores en la solución de problemas tecnológicos, el ahorro y la generalización”, manifestó.
Y explicó que sobre todos esos aspectos hay que pronunciarse en las asambleas. “Hoy el sindicato tiene que cambiar el discurso y acentuarlo en cómo optimizar los recursos, garantizar resultados positivos y exigir a las administraciones una mejor gestión en la labor y responsabilidad que tienen”, añadió.
Acerca del autor
Graduado de Profesor de Educación General en el Instituto Superior Pedagógico Félix Varela, de Villa Clara, Cuba (1979). Ha laborado en la Revista Juventud Técnica, semanario En Guardia, órgano del Ejército Central, periódicos Escambray, CINCO de Septiembre y Granma. Desde el año 2007 es corresponsal de Trabajadores en la provincia de Cienfuegos. Está especializado en temas económicos y agropecuarios. En 1999 acompañó en funciones periodísticas a la segunda Brigada Médica Cubana que llegó a Honduras después del paso del huracán Mitch. Publicó el libro Verdades sin puerto (Editorial cubana MECENAS). Ha estado en otras tres ocasiones en esa nación centroamericana, en funciones periodísticas, impartiendo conferencias a estudiantes universitarios, asesorando medios de comunicación e impartiendo cursos-talleres sobre actualización periodística a periodistas y comunicadores. Multipremiado en premios y concursos internacionales, nacionales y provinciales de Periodismo. Fue merecedor del Premio Provincial Periodístico Manuel Hurtado del Valle (Cienfuegos) por la Obra de la Vida – 2012. Le fue conferido el Sello de Laureado, otorgado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura (SNTC). Mantiene evaluación profesional de Excepcional.
Lo que se puede y debe exigir es que se cambie la concepción de que el Socialismo cubano debe alcanzar a ser un Modo de producción y no un Modo de distribución, mencionar al menos en las asambleas sindicales que históricamente solo aprueban un Plan on el que no stán de acuerdo o no entienden que el déficit presupuetario de Cuba es de mas de 86 mil millones y que bajo las condiciones actuales en el 2021 la utopía planteada por l Minstro Gil Fdez de crecer un 7% en el PIB sin un esfuerzo real grande de trabajo es impensable alcanzarlo.Si seguimos casados con la distribución nadie va a entender nuestra situación de crisis real.
Hay que explicarles a los trabajadores que la economía cayó el año 2020 en un 10% debido a la pandemia de manera que el nivel de vida disminuyó en ese porcentaje. No se puede exigir en estas difíciles circunstancias aumentos salariales. Los aumentos en los últimos años fueron financiados con emisiones inorgánicas de dinero lo que provocó alza de precios. La inflación, en todo el mundo, afecta los salarios y pensiones.