El Secretario de Estado de EE.UU. miente deliberadamente al calificar a Cuba como país patrocinador del terrorismo, reiteró en la tarde de este martes el director de la Dirección de Estados Unidos de la Cancillería Cubana, Carlos Fernández de Cossío, en declaraciones a la prensa.
Fernández de Cossío destacó la condena realizada en la noche del lunes por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba en términos firmes y absolutos, luego de que se conociera la calificación de nuestro país como patrocinador del terrorismo por parte del gobierno de EE.UU. y la inclusión de la Mayor de las Antillas en la espuria lista elaborada por el Departamento de Estado.
Al enumerar las razones por las que se rechaza tal calificación, el diplomático cubano precisó que en primer lugar, Cuba no es un país patrocinador del terrorismo. “Eso lo conoce el presidente de los Estados Unidos, el secretario de Estado que mintió deliberadamente ayer al hacer las calificaciones. Eso lo conocen los funcionarios del departamento de Estado y lo conocen los funcionarios en ese país que se encargan de la aplicación y el cumplimiento de la ley”, afirmó.
Otra razón -consideró- es que Cuba no le reconoce autoridad a las listas de calificación de países que emite el Departamento de Estado. Estas son listas – como las de los Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo – que son totalmente unilaterales, carentes de reconocimiento o autoridad internacional alguna, que existen y se concibieron para difamar países con los que Estados Unidos tiene discrepancias y para aplicar medidas de coacción económica contra esos países. Se usa para castigar a países como en el caso de Cuba, que se le aplica para castigar al pueblo cubano y para castigar a la nación.
“Cuba es un país víctima del terrorismo, el terrorismo que ha sido organizado, financiado y perpetrado por el gobierno de EE.UU. o por individuos u organizaciones que radican en territorio de ese país o que operen desde este territorio con la tolerancia de las autoridades de ese país”, expresó Fernández de Cossío.
Dijo además que una razón adicional es el oportunismo político de aquellos funcionarios que se sienten en deuda política con motivo de las elecciones recién ocurridas en Estados Unidos o aquellos que están adelantando favores de cara al año 2024 y creen que para un grupo minoritario con posiciones extremas contra Cuba es atractivo estar aplicando medidas contra nuestro país a última hora.
Agregó que esta medida ha recibida gran rechazo a nivel internacional, el del pueblo de Cuba, de muchos sectores dentro de EE.UU. incluyendo miembros prominentes del Congreso – tanto de las Cámara como del Senado – organizaciones religiosas dentro de ese país y otras internacionales.
“Hay una razón adicional que es importante tomar en cuenta: esta medida se toma por un gobierno saliente con el objetivo evidente para todo el mundo de tratar de imponer obstáculos a cualquier recomposición futura a las relaciones entre Cuba y los Estados Unidos. Es un propósito deliberado y que se detecta desde el momento en que fue pronunciada esta calificación contra nuestro país. Insistimos que se trata de una calumnia, de una injuria contra Cuba”, concluyó.