Por primera vez en la historia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), una Norma Internacional del Trabajo alcanza la aceptación de sus 187 Estados miembros, en el 2020. La ratificación universal del Convenio número 182 sobre las peores formas de trabajo infantil (1999).
Lo anterior significa que ahora todos los niños disponen de protección jurídica. El logro llega en un momento oportuno, ya que las Naciones Unidas declaró el 2021 como Año Internacional para la Eliminación del Trabajo Infantil.
Al respecto, Vera Paquete-Perdigao, directora del Departamento de Gobernanza del organismo refiere que el acuerdo compromete a los países a adoptar medidas inmediatas dirigidas a retirar a los niños de estas actividades y ofrecerles rehabilitación y el cuidado necesario, con atención especial hacia las niñas.
En las dos últimas décadas, la tasa de trabajo infantil disminuyó de 246 millones a 152, cifra que sigue siendo muy elevada. La mitad de estos niños realizan las peores formas de trabajo infantil, que incluyen, la esclavitud y prácticas análogas, la prostitución y la pornografía, actividades ilícitas como el uso de niños para el tráfico de drogas, y trabajos peligrosos que puedan dañar su salud, seguridad o moral. (GCL con información de www.ilo.org)