En México, la Secretaría de la Función Pública emitió un nuevo acuerdo para que continúe el trabajo desde la casa en las dependencias oficiales debido al incremento de contagios de la COVID-19. Esto, en aquellos casos que sea posible sin alterar el cumplimiento de sus funciones.
La disposición será obligatoria para los mayores de 60 años, personas con discapacidad, mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, y enfermos crónicos de riesgo.
Desde finales de marzo de este año, gran parte de los servidores públicos federales realizan actividades a distancia. Primeramente, las autoridades de salud aplicaron medidas de distanciamiento social.
La jefa de Gobierno de Ciudad de México Claudia Sheinbaum, llamó a regresar al aislamiento total y a no hacer fiestas, al tiempo que pidió a las familias no angustiarse por la sobredemanda de balones de oxígeno que provoca largas filas y precios exorbitantes.
Los hospitales capitalinos se muestran casi desbordados. Según el último corte nacional, el país tiene un millón 325 mil 915 contagios y 118 mil 598 decesos por la COVID-19.
Trabajadores del Sistema de Transporte Colectivo Metro, pidieron entrar en la primera etapa de vacunación contra la enfermedad, ya que transportan a más de 6 millones de personas al día.
(GCL con información de PL / eluniversal.com.mx)