El demócrata Joe Biden encabeza el conteo de votos en el estado de Pensilvania, informó hoy la cadena CNN.
Hasta tempranas horas de la madrugada de este viernes, el presidente Donald Trump estaba al frente en ese estado pero en un informe más reciente Biden pasó a encabezar el conteo con 49,5 por ciento y tres millones 295 mil 319 sufragios, mientras el actual presidente tenía tres millones 289 mil 725.
También el recuento le es favorable al demócrata en Nevada, Arizona y Georgia. En este último estado se anticipa una cerrada lucha por el control de los dos asientos del Senado y se prevé que los demócratas puedan ganar para alcanzar la paridad en ese foro.
Si se produce esa igualdad, el vicepresidente, si es electa la demócrata Kamala Harris, romperá la igualdad para su partido.
Mientras tanto, en el lado republicano solo el círculo más íntimo de Trump insiste en que las elecciones fueron fraudulentas.
Llama la atención un Twitter del hijo de Trump.
“Lo mejor para el futuro de América es que @realDonaldTrump vaya a la guerra total por esta elección para exponer todo el fraude, el engaño, los muertos/ya no en los votantes del estado, que ha estado ocurriendo durante demasiado tiempo”, escribió.
“Es hora de limpiar este desastre y dejar de parecer una república bananera!” (Tomado de PL)
Para cualquier presidente electo, será muy difícil gobernar en los próximos 4 años, entre la extrema polarización de la sociedad estadounidense que ha mostrado estas elecciones, al igual que senado y cámara, que boycotearán cualquier iniciativa en uno y otro sentido por oposición y la depauperante condición de la economía en contubernio con los avances diarios de la Covid. De salir Biden, los retos internos que le impone este escenario son tan extremos, que apenas le quedará tiempo para desmontar todas las medidas de endurecimiento del bloqueo que ha puesto Trump contra Cuba, incluso para pensar el restablecimiento de relaciones. Como la tendrá tan difícil, la maquinaria republicana, con los rezagos de trumpismo, le ganará las elecciones del 2024, se postule Marco Rubio o Chicho el Cojo. Claro está, el primero es tan anticubano que las tragedias de la época Trump nos parecerán un regalito si este fuera presidente algún día.