Revelaba el escritor uruguayo Mario Benedetti, en una entrevista concedida, en el año 1971, al periodista Ernesto González Bermejo, que no estaba arrepentido de ser, mal que bien, un escritor, entre otras razones porque creía que no habría podido no serlo.
«Pero te confieso –también afirmaba– que en general no escribo para el lector que vendrá, sino para el que está aquí, poco menos que leyendo el texto sobre mi hombro. Si todo sirve, o sirvió para algo, es difícil saberlo. Mirá, por lo menos a mí sí me sirvió».
En las relaciones autor-lector –concluía con evidente humor– «no sirven las computadoras ni, a Dios gracias, la democracia representativa. Hay una zona de misterio, una incógnita, que a veces solo se despeja cincuenta años después. Lamentablemente, para ese entonces no me van a poder mandar un telegrama con el resultado».
El paso de los años no ha contribuido, sin embargo, a confirmar en toda su dimensión la total certeza de tales palabras, porque no resulta difícil advertir que la obra, en verso y en prosa, legada por Mario Benedetti ha trascendido las fronteras de su época para convertirse en lectura del tiempo futuro.
Materiales de la revista Casa de las Américas de / sobre Mario Benedetti (Fondo Editorial Casa de las Américas, La Habana, 2015, 448 pp), con selección y notas de Xenia Reloba, permite, indudablemente, apreciar el alcance y permanencia de tan fecunda producción intelectual.
Como es fácil imaginar por su título, en este volumen se recopilan, en dos secciones, textos aparecidos, a lo largo de varias décadas, en las páginas de la revista Casa de las Américas, tanto con la firma del autor de Montevideanos como de la autoría de otros creadores que se acercan a su obra.
En la primera sección del volumen, se han agrupado poemas, narraciones, ensayos, críticas literarias, reseñas, discursos, mensajes, entrevistas, que se publicaron en Casa de las Américas durante años y que demuestran los intereses que preocuparon –y ocuparon– a Mario Benedetti en su fértil ejercicio literario.
De esa colección, selecciono el poema «Ahora todo está claro», publicado en el número 113 de la revista, correspondiente a marzo-abril de 1979, en que, con fina ironía, reflexiona sobre un tema de permanente debate en la agenda del mundo contemporáneo.
Cuando el presidente Carter
se preocupa tanto
por los derechos
humanos
parece evidente que en ese caso
derecho
no significa facultad
o atributo
o libre albedrío
sino diestro
o antizurdo
o flanco opuesto al corazón
lado derecho en fin
en consecuencia
¿no sería hora
de que iniciáramos
una amplia campaña internacional
por los izquierdos
humanos?
En «Sobre Mario Benedetti», la última parte de la obra, el lector encontrará valoraciones diversas –como artículos, ensayos, reseñas, mensajes…–, en que autores de diversas generaciones y latitudes se acercan tanto a la personalidad del escritor como a algunos de los títulos que integran su producción literaria.
Poeta, narrador, ensayista, crítico literario, dramaturgo, Mario Benedetti (Uruguay, 1920-2009) es considerado una de las voces más relevantes de las letras de Nuestra América. Comprometido con las causas justas de su tiempo, supo defender los más puros ideales de libertad, soberanía e independencia de la humanidad.
Galardonado, entre otros reconocimientos, con el Premio Reina Sofía de Poesía, en su amplia bibliografía aparecen, entre otras obras, Gracias por el fuego, La tregua, Poemas de la oficina, Cuando éramos niños, Crítica cómplice, Letras del continente mestizo. El cumpleaños de Juan Ángel, El país de la cola de paja y Pedro y el capitán.
Es conocida la estrecha relación profesional y personal que mantuvo Mario Benedetti con Cuba, país donde residió por algunos años, en que laboró en la Casa de las Américas –junto a su fundadora Haydée Santamaría–, lo cual le permitió fundar el Centro de Investigaciones Literarias (CIL) de tan prestigiosa institución.
En «Mario Benedetti: hombre de un filo único», las palabras de presentación de Materiales de la revista Casa de las Américas de / sobre Mario Benedetti, Caridad Tamayo Fernández afirma:
El propósito de escribir este prólogo ha terminado de descubrirme al Benedetti de todos y al Mario de Casa. Cuando se lee de un tirón todo lo que publicó en la revista Casa de las Américas –que es solo una parte, pero muy significativa, de su inmensa obra– así como los cientos de cartas suyas que conservan los archivos de nuestra institución, deslumbra tanta sencillez, humildad, consagración, tanto compañerismo, amor, lealtad, y sentido de la justicia en un solo hombre. Se termina entendiendo con claridad por qué fue el inolvidable Mario de la Casa y el Benedetti de todos.
Con esta selección de textos se revela no solo el universo intelectual del escritor, sino también algunos juicios que valoran su quehacer. Textos salvados para la memoria que, desde las páginas de la revista Casa de las Américas, invitan a descubrir la huella dejada, para su tiempo y para el tiempo por venir, por Mario Benedetti.