Todo llega, y para miles de jóvenes que llevan meses -y por qué no decir años- preparándose para lograr su pase a la Universidad, comienzan hoy finalmente los exámenes de ingreso a la Educación Superior en el curso escolar 2021.
Hablamos de más de 20 mil 300 aspirantes de Guantánamo, Santiago de Cuba, Holguín, Granma, Las Tunas, Camagüey, Cienfuegos, Villa Clara y Mayabeque, y el municipio especial Isla de la Juventud, que constituyen el 55, 2 por ciento del potencial de alumnos de bachillerato que deben presentarse a las pruebas de ingreso en el país.
Para esta mañana ha sido fijada la prueba correspondiente a la asignatura de Matemáticas, el próximo martes será la de Español y el viernes 16 la de Historia de Cuba.
Más de una modelación ha tenido en estos meses de pandemia el proceso de ingreso a la Educación Superior, que, como tantos otros en ese y demás sectores y esferas de la vida nacional, ha precisado de reajustes y adecuaciones frente al impacto de la COVID-19 y los desafíos de una realidad muy cambiante.
Al comparecer este jueves en la Mesa Redonda, el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz puntualizó que desde hoy hasta el 28 de noviembre realizarán las pruebas de ingreso las provincias con una situación epidemiológica favorable y que hayan podido garantizar a los alumnos de grado 12 las cuatro semanas de preparación con sus profesores.
Por su parte, en aquellas con trasmisión del virus, la fecha será diferida hasta que la situación mejore, puedan completarse esas cuatro semanas presenciales de los aspirantes para su preparación y sea posible entonces definir el calendario de los exámenes, explicó.
Ya a fines de septiembre, cuando en ese espacio radiotelevisado habló de tres convocatorias en razón a la diversidad en cuanto a la situación epidemiológica en el país, el doctor José Ramón Saborido Loidi, ministro de Educación Superior, advirtió que un rebrote u otra complicación en un territorio podría obligar a “moverlo” de fecha.
Eso sí, sin importar cuantas se hagan, cada convocatoria será única, no habrá en esta ocasión segundas oportunidades y cada aspirante examinará solo una vez cada asignatura.
Sin embargo, y como todos los que concluyen el grado 12 tienen asegurada este año -al menos numéricamente- una plaza en la Educación Superior, aprobar los exámenes de ingreso no será imprescindible, pues todas las opciones de estudios universitarios recorrerán el escalafón hasta el final.
Tendrán prioridad, claro está, los que aprobaron y luego los que no, pero las ofertas llegarán, incluso, hasta aquellos que no se presenten a las pruebas de ingreso, explicó en reciente intercambio con la prensa René Sánchez Díaz, director de Ingreso y Ubicación Laboral del Ministerio de Educación Superior.
Contamos con 48 mil 400 plazas para los graduados de preuniversitario, cifra superior a la cantidad de aspirantes por esa vía a cursar estudios superiores, algo nunca antes alcanzado y que logramos ahora, en condiciones ciertamente difíciles, significó.
Por lo pronto, más de siete mil plazas fueron ya otorgadas, por ejemplo, a ganadores de concursos, a aquellos que cursaron el bachillerato en los colegios universitarios y a los que aprobaron las pruebas de aptitud para las carreras de Periodismo y Relaciones Internacionales, eximidos por esta vez de realizar los exámenes de ingreso a la Universidad. (Tomado de ACN)