Miguel Díaz-Canel, Presidente de la República de Cuba, subrayó el carácter popular y de estricto apego a la ley que tiene el plan de enfrentamiento a coleros, revendedores, personas corruptas y a quienes trafican divisas, operación en marcha desde esta semana en todo el país.
Sus palabras, en una reciente sesión del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros en la que se aprobó ese plan, fueron trasmitidas hoy en la mesa redonda informativa en la que Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro, dio a conocer sus pormenores y objetivos, batalla que se librará con fuerza y sistematicidad a partir de un reclamo del pueblo y que ya ha sido acogido de manera favorable.
Díaz-Canel manifestó que esas personas inescrupulosas llevaban a cabo manifestaciones ilícitas, y actuaron con impunidad porque no fueron enfrentadas de manera inmediata.
Hay tres elementos que ordenan el modo de actuación: identificación de quiénes son los coleros y profilaxis, y donde no haya entendimiento actuar con rigor, con toda la legitimidad que da la legislación vigente, manifestó.
Subrayó que es muy importante el ordenamiento popular, que no debe reconocer el derecho de los coleros de adueñarse de la cola, por lo cual se trabajará sin exageraciones ni desproporciones.
Dijo que ya salieron los que tratan de victimizar a esos individuos cuando en realidad se actúa contra una cadena que incluye a colero, acaparador, revendedor y traficante de divisas, con la que se afecta e irrita al pueblo trabajador.
Una de las falsedades que esgrimen es que el desabastecimiento -que no asocian al bloqueo- es la causa de esta situación, y eso es un planteamiento deshonesto sobre todo cuando el gobierno trata de enfrentar esta situación con soluciones para todo el mundo, expresó.
El presidente cubano explicó que otros tratan de justificar la existencia de esta figura como un actor económico porque algunos pocos pueden pagar esto y eso es un planteamiento elitista y egoísta.
Señaló que detrás de estas opiniones vienen acusaciones al Estado y el Gobierno; nosotros reconocemos nuestras insuficiencias pero hay una continuidad en la obra de la Revolución que ha actuado de manera excepcional ante la COVID-19 con el apoyo de nuestro pueblo.
Ratificó que no vamos a actuar contra el que ayuda a otro en una cola o una familia, sino contra el colero que forma parte de la cadena de acaparadores y revendedores, y estamos actuando ante una solicitud de la población, acotó Díaz-Canel.
Aclaró que los desabastecimientos no son las justificaciones de estas nocivas manifestaciones sino que deben promover la solidaridad y el comportamiento ético, en tanto la mayoría de la gente que está en esto no trabaja, aprovechan nuestros problemas económicos para enriquecerse a costa de los demás y limitan el acceso de la población las cosas que tenemos, en las condiciones que tenemos.
(Tomado de ACN)
¡LA CALLE ES DE LOS REVOLUCIONARIOS!
La frase les llegó a sus oídos como una bendición a aquellos que dentro y fuera de Cuba andan detrás de una fuente para que continúen cayéndoles los cheques. Ya ocurrió algunos años atrás cuando nuestros dirigentes expresaron algo parecido acerca de las universidades. Al día siguiente llegarían las llamadas a los celulares de los voceros de dentro, por los que también cobran para mantener los altos presupuestos que requieren las conocidas emisoras hispanas de la Florida. Entonces saldrán las respuestas, que si los llamados opositores no podrán salir de sus casas, que si ellos también tienen derecho a salir a disfrutar las calles de su país,…etc. Claro que es una distorsión, porque no dicen cuál es el verdadero sentido de la frase que escucharon, que significa realmente que los coleros, acaparadores y revendedores, no pueden adueñarse de las mercancías que hoy se ofertan con mucho esfuerzo para satisfacer, aunque tal vez no completamente en momentos muy puntuales, las necesidades de todo el pueblo trabajador, de ancianos, niños y personas vulnerables, que no pueden pagar los precios de la llamada bolsa negra. Los que se prestan a eso y quieren vivir y enriquecerse de esa forma, no pueden considerarse jamás revolucionarios y por eso, el pueblo no les dejará la calle a su libre albedrío.
Intervenciones razonadas, ponderadas, suaves en apoyo y firmes en medidas.Como suele decir nuestro presidente: «y vamos por más»…, hasta dejar la «cola» reducida a una fila corta, sin dueños individuales de colas, sin acaparadores, sin acomodadores comerciales que usen «linternas desde la oscuridades dentro de la tienda, sin revendedores, y finalmente con las garantías tranquilas, normales, institucionales también al comprador mayoritario; prevenir al comprador del riesgo de comprar hasta la corrupcion.
Las intervenciones confirman que si sabemos escuchar y actuar. Quien no aprenda y siga otra inercia que ceda su espacio y deje que otro capacitado y con más energía lo haga.
Confirma que el pueblo lo asume siempre que se le ofrezcan los instrumentos adecuados para dar su opinión y participación una vez informado el por qué y hasta dónde se quiere llagar se suma.
Gracias.
Es bueno que nuestro pueblo se una para combatir y repudiar todo lo que tanto nos hace mal, como son todas estas indisciplinas sociales.haci el enfrentamiento a la corrupcion,el delito y los males sociales van ocupando un lugar ascendente ante nuestra sociedad; ya que nuestro pueblo merece un mejor bienestar.por lo menos se esta ganando terreno en el protagonismo de denunciar a las autoridades pertinente todas las violaciones que se estan poniendo en practica por parte de personas inescrupulosas que no piensan en las afectaciones que le provocan a los demas que con un alto nivel de honradez trabajan dignamente a diario ,aportando su pedacito.por eso insisto en que se deben de realizar verificacio fiscalizada y control en los lugares donde se maneje recursos,para prevenir y no lamentar .
Es una pena que nuestro presidente tenga que ocupar su tiempo en asuntos como son las indisciplinas sociales,de las que tantos se ha venido quejándo la población y para las cuáles existen actores públicos encargados de su control, lo cierto, es que hay que ponerle cotó a hecho que laceran y molestan a pueblo, sigo insistiendo que se tiene que realizar más fiscalización y control allí donde la población está alertando y verificar pienso que con mayor rigor en manos de quienes se ponen los recursos no digo que todos pero la corrupción y la contrarrevolución van de la mano y hay personajes que están vacilando los refuerzos que está haciendo el estado para que los productos lleguen a la población, se tiene que utilizar más las denuncias que advierten el desvío de productos,este país todo lo tiene legislado hoy con la informatización todo es posible aplicar la trazabilidad para llegar a la génesis de las pérdidas económica que se vienen sucediendo a la par del simple acaparadores o revendedores.