Con el análisis profundo de situaciones relacionadas con el enfrentamiento a la Covid-19, la pesquisa a la población, la gastronomía y los salideros de agua en los municipios Arroyo Naranjo y San Miguel del Padrón, en específico el Consejo Popular Luyanó Moderno, se inició la sesión de este 22 de mayo del Consejo de Defensa Provincial (CDP) de La Habana.
Luis Antonio Torres Iríbar y Reinaldo García Zapata, presidente y vicepresidente del CDP, respectivamente, llamaron la atención sobre la complejidad que puede generar en la capital la falta de rigor científico, técnico y político en la pesquisa de la población, la búsqueda de posibles personas contagiadas y de contacto, y el seguimiento de las personas egresadas.
El Consejo de Defensa Municipal de Arroyo Naranjo explicó las acciones que implementan para revertir la situación en ese territorio, donde en mayo se han reportado 16 casos, con predominio de asintomáticos.
Ante la situación en el municipio, se llamó a profundizar en la pesquisa y su control, seguir buscando contactos y sobre todo “no estar para nada confiados”, dijo el presidente del CDP.
Igualmente, el Consejo de Defensa Municipal de San Miguel del Padrón explicó sus 23 acciones relacionadas con la solución a quejas de Luyanó Moderno en la gastronomía, el Sistema de Atención a la Familia, las ventas de CIMEX y Tiendas Caribe, la disciplina y el cumplimiento de las condiciones de aislamiento.
“No se puede aflojar, sobre todo en los municipios donde hay vulnerabilidades. Los modelos alertan que si bien la epidemia se concentra en territorios como Centro Habana, Cerro y Playa, hay varias zonas vulnerables donde, además, no se respeta el aislamiento”, explicó Torres Iríbar.
El también Primer Secretario del Partido en La Habana llamó a evitar que “el exceso de confianza nos robe más vidas y más tiempo”.
Según informó el doctor Carlos Alberto Martínez Blanco, director provincial de salud, La Habana presenta una tasa de incidencia de 43,04 por 100 mil habitantes, con ocho municipios por encima de la media provincial: Cotorro, Centro Habana, Cerro, Plaza de la Revolución, Regla, La Habana del Este, San Miguel del Padrón y La Habana Vieja. El municipio del Cotorro presenta la mayor tasa de incidencia.
Al cierre de ayer se habían procesado mil 880 muestras, de ellas, cinco positivas en la provincia.
De los cinco casos confirmados, dos son asintomáticos, todos con fuente de infección demostrada al ser contactos de pacientes anteriores. Corresponden al sexo femenino uno y al masculino cuatro. Según grupo de edades, de 15 a 59 años, cuatro personas, y uno con más de 60 años; con vínculo laboral, cuatro y sin vínculo, uno. Por cada uno de los cinco casos confirmados se vigilan como promedio 37 contactos.
Permanecen aislados en la atención primaria de salud 927 contactos, y en centros de aislamiento 361.
En la capital, tras el cierre del Consejo Popular Acosta, se mantienen cuatro eventos, tres de ellos en comunidades, y uno institucional. En el día no se reportan casos relacionados con los sucesos en comunidades.
Las estadísticas muestran que al cierre de este parte se pesquisó el 36,2 % de la población y el 99,6 por ciento de la población vulnerable, detectándose 126 presuntos pacientes con Infecciones Respiratorias Agudas (IRA), y de ellos 22 fueron clasificados como sospechosos y se actuó según protocolo.
En el caso de la pesquisa especializada, se investigó el 35,9 % de la población total y el 91,2 % de la vulnerable, detectándose 10 pacientes con síntomas respiratorios, de ellos cuatro clasificaron como sospechosos y fueron remitidos para ingreso. Los cuatro sospechosos representan el 18,1 por ciento del total de la pesquisa activa de la provincia. Reportan IRA los consejos populares Buena Vista, Rampa, Belén, Alamar Este, San Agustín y Calabazar.
De acuerdo con el director de salud, en la provincia se autopesquisaron mil 167 personas, de ellas 136 declararon síntomas respiratorios. Siete contactos con casos positivos, el 100% de los presuntivos de IRA fue evaluado por personal médico.
En el séptimo día del estudio poblacional fueron visitadas el 97,5 por ciento de las familias previstas y el 112,5 por ciento de las personas programadas, con un promedio de 3,5 por vivienda. Como resultado, se acumulan 848 PCR negativos, y uno positivo. Está pendiente de concluir el trabajo de campo en La Habana Vieja, La Habana del Este y Playa.
De la dotación de mil 20 camas en hospitales para la atención de la Covid-19, se encuentran ocupadas 288, de ellos, 166 pacientes sospechosos y 122 confirmados.
Los SAF, un punto y aparte
En la reunión se analizó la situación detectada en un recorrido por algunas de las unidades del Sistema de Atención a la Familia (SAF). Entre ellas se mencionan el mal estado constructivo, la mala elaboración de los alimentos, la falta de insumos y de productos para la limpieza e higienización de locales.
Al respecto, se decidió realizar un levantamiento del estado constructivo y las condiciones en esa red para revertir el actual panorama, así como cerrar aquellos centros que puntualmente no reúnan las condiciones, sin que esto afecte la entrega de alimentos a las poblaciones vulnerables acogidas al sistema.
Dixon Fuentes, fiscal provincial, enfatizó que, paralelo con las mejoras en el plano constructivo, las principales transformaciones deben ser en el orden subjetivo, con mecanismos de control por parte de la Unidad Básica y la empresa.
Al hacer las conclusiones del encuentro diario, Torres Iríbar llamó a trabajar por elevar la percepción de peligro, toda vez que las personas pudieran interpretar que la reducción del número de casos y de ingresos significa que lo peor pasó; cuando, al menor descuido, pudiera revertirse esa tendencia y retroceder lo logrado en el control de la epidemia.
“Tenemos que elevar el asilamiento social y físico, sobre todo el fin de semana, seguir elevando el control sobre los municipios y en los consejos populares con medidas de incremento de las acciones en Centro Habana, La Habana Vieja, los consejos Latino y Luyanó Moderno”, dijo.
Pero, enfatizó, hay otras zonas, áreas y lugares, cerca de 200, que son vulnerables, donde hay que incrementar y hacer más efectivas las pesquisas y, sin descuidar nada, dedicarles los principales esfuerzos.