Erick Hernández nunca ha parado de superarse. Y no. No iba llegar una pandemia a pretender que algo iba a ser distinto. Desde la sala de su casa, y gracias a las prestaciones tecnológicas, Cuba fue testigo de un nuevo record Guinness: 188 toques al balón con la cabeza, en 30 segundos, desde la posición de parado.
La marca anterior también estaba en su poder: primero la fijó en 185, el 17 de octubre de 2009, y, más tarde, el 11 de junio de 2011, consiguió 187. Hoy, con el valor de solo un impacto más, demostró que nunca se debe parar de luchar y quizás por esto dedicó su éxito a todo el personal de salud que enfrenta la Covid 19 desde hace ya varias semanas.
Erick comentó en las pantallas del Canal Habana la dificultad de un récord como este, en el cual se necesita una absoluta concentración y coordinación de los movimientos. Para esta marca el contexto era diferente, tuvo que prepararse desde casa ante la imposibilidad de asistir al gimnasio, pero, una vez más, impuso su maestría y talento.
Si no es fácil dar diez o 20 toques a la esférica con la cabeza, parece de otro planeta conectar más de seis por segundo y terminar con 188 en medio minuto. Apenas un dominio más, una nueva cota y un mensaje que vale incluso más que el propio record.