Fotos: Cortesía de EIPH
En una fase avanzada de ejecución se encuentra la primera etapa de una inversión para trasvasar agua desde la presa Maurín, en el Artemiseño municipio de Bauta, hasta el sistema de Ariguanabo, afectado actualmente por un déficit de 841 litros por segundo, y mejorar el suministro a la zona oeste de la capital cubana.
La ingeniera Aymée Aguirre Hernández, directora general de la Empresa de Investigaciones y Proyectos Hidráulicos (EIPH), de la Habana, explicó a Trabajadores que resulta notable la afectación en el abasto a esa región, donde se ubican los municipios de La Lisa y Playa, ambos con poblaciones numerosas, por lo que se le ha dado prioridad máxima a la realización de las obras requeridos.
Los mismos consisten en la instalación de una toma superficial con sifón en el embalse y de una conductora de 9,9 kilómetros de longitud, las que permitirán incorporar 300 litros por segundo al sistema Ariguanabo. Junto al tanque receptor se construye una planta potabilizadora que garantizará la filtración y cloración para garantizar la calidad, de acuerdo con las normas establecidas.
Esos procesos se realizarán una vez finalizada la primera etapa. En una segunda se aplicarán en esa propia instalación otros tratamientos que elevarán aún más los indicadores cualitativos del líquido.
Consideró que el resto ha sido y es fuerte, pues se trata de una obra compleja tecnológicamente. Todos los componentes se han concebido a partir de recursos existentes en el país, como por ejemplo, los cinco filtros, las conexiones y otros accesorios.
La especialista precisó que los proyectos se han hecho sobre la marcha para agilizar los trabajos que se ejecutan a un ritmo muy intenso.
Acerca del autor
Graduado de Profesor de Educación General en el Instituto Superior Pedagógico Félix Varela, de Villa Clara, Cuba (1979). Ha laborado en la Revista Juventud Técnica, semanario En Guardia, órgano del Ejército Central, periódicos Escambray, CINCO de Septiembre y Granma. Desde el año 2007 es corresponsal de Trabajadores en la provincia de Cienfuegos. Está especializado en temas económicos y agropecuarios. En 1999 acompañó en funciones periodísticas a la segunda Brigada Médica Cubana que llegó a Honduras después del paso del huracán Mitch. Publicó el libro Verdades sin puerto (Editorial cubana MECENAS). Ha estado en otras tres ocasiones en esa nación centroamericana, en funciones periodísticas, impartiendo conferencias a estudiantes universitarios, asesorando medios de comunicación e impartiendo cursos-talleres sobre actualización periodística a periodistas y comunicadores. Multipremiado en premios y concursos internacionales, nacionales y provinciales de Periodismo. Fue merecedor del Premio Provincial Periodístico Manuel Hurtado del Valle (Cienfuegos) por la Obra de la Vida – 2012. Le fue conferido el Sello de Laureado, otorgado por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura (SNTC). Mantiene evaluación profesional de Excepcional.
Los trabajos de Instituto de Recursos Hidráulicos en los años sesenta, luego del huracán Flora, bajo la consigna voluntarista de que ni una gota de agua llegue al mar, se hicieron atropelladamente y sin análisis profundos de las afectaciones que provocaban, así humedales naturales como la inmensa Laguna de Ariguanabo ya no existieran en 1973. Se hicieron presas en lugares donde las cavernas llevaban el agua directamente al mar, dejando a la Laguna sin agua. La Laguna de Ariguanabo es un sistema complejo conectado con el Almendares [manantiales de Vento] y con la cuenca del Mayabeque a través de un manto freático que esta sobre rocas impermeables.
Todas esas presas necesitan estudios serio de factibilidad a fin de recuperar lo que la naturaleza nos dio.