Confecciones Yamarex “teje” su lucha contra la Covid-19

Los usuales colores rojo y amarillo de los uniformes escolares no predominan ahora sobre las máquinas de coser de la Fábrica Textil “Lidia Doce”, en Holguín. El afán de sus “sus tejedoras” es el mismo de siempre, pero a la vista sorprende un mar de tejidos verdes que revelan, desde hace varios días, que algo diferente se “cose” en la instalación, perteneciente a la UEB Confecciones Yamarex.

Lo mismo sucede en los otros tres talleres de esa entidad, ubicados en los municipios de Antilla, Banes y Gibara. El esfuerzo laboral de los cuatro colectivos se pone ahora en función de producir nasobucos para el Ministerio de Salud Pública (Minsap), labor que se inserta dentro del plan nacional de Cuba para prevenir y enfrentar al nuevo coronavirus, que ya se encuentra en la mayoría de los países del mundo y ha contagiado a más de 157 mil personas.

Esa compleja realidad no le es ajena al colectivo de la “Lidia Doce”, por lo cual sus obreras, que son mayoría, se esfuerzan en la producción del nuevo accesorio. Odalis Almenares Pupo, especialista principal de calidad, señala que “todas se han tomado la tarea con mucha seriedad, tratan de cada día hacer un poquito más, y como siempre lo vamos a lograr. Este producto lo estamos confeccionando por segunda vez, la primera fue cuando el brote de la influenza H1N1.”

Mercy Ochoa Hijuelos, directora de la UEB Confecciones Yamarex, explica que “una vez que recibimos la indicación desde la empresa nacional Boga de que teníamos que cumplir con la demanda de nasobucos del Minsap a nivel de país, iniciamos la producción en los cuatro talleres. Las características del nasobuco nos las dio Salud Pública y así se están confeccionado: de tejido de algodón, en este caso warandoll, de tres capas y dos pliegues.

Un elevado ritmo de trabajo y una eficiente organización desde la UEB ha permitido que hasta la fecha se hayan confeccionado en Holguín más de 37 mil nasobucos, cifra que se incrementará.