Cargando...Entre las tramas y subtramas de Entrega, la telenovela cubana de turno, sin lugar a duda la del profe Manuel ha sido de las más controvertidas. Al margen de la creíble actuación del actor Ray Cruz que encarna el personaje, el guión ha colocado en el tapete público, de alguna manera, dos temas actuales de la educación: por una parte la actitud ética del maestro, por la otra la enseñanza de la asignatura Historia de Cuba.
Empecemos por el primero, un asunto sobre el cual hay demasiada tela por donde cortar. En los últimos años la ética en este sector se ha visto de alguna manera lacerada por el comportamiento de algunos trabajadores (no se les puede llamar educadores) quienes con determinadas actitudes, criticables, han tratado de desacreditar la Educación.
Fraudes y otras acciones denigrantes han estado presentes en el actuar de algunos y los ejemplos varían en correspondencia con los contextos y lugares de residencia. Se han dado casos de maestros que piden dinero a los padres (y no minucias) para hacer fiestas en el aula o fuera de tales espacios. En tanto otros, les “sueltan a boca de jarro”, como se dice en el argot popular, a algunas familias las necesidades propias para ver si estas “caen en la trampa” y logran la solución de algún que otro problema.
Sin embargo, y por si fuera poco, están quienes imparten clases de pésima calidad y en la propia aula les dan sus “señas” a los alumnos para luego cobrar repasos particulares, los famosos repasadores, una figura surgida en los últimos años, aunque a decir verdad también están los que tienen licencia para ejercer esta labor.
Aunque todo ello existe, soy de las convencidas de que el ejército de los educadores supera a los que convierten la profesión en un mero negocio.
La ética debe estar presente en el quehacer cotidiano del maestro; desde que sale de su casa temprano en la mañana, espera la guagua en una parada o compra el pan en el establecimiento del barrio, hasta que llega a la escuela y comienza la fatigable jornada (no siempre bien reconocida); esa que no termina, aunque toque el timbre de salida a las cuatro de la tarde.
Ser maestro es una actitud ante la vida, y pasa —como en otras esferas de la vida— por el ejemplo personal. Un educador en el sentido preciso de la palabra es el espejo donde los educandos encuentran los mejores valores y donde debe haber absoluta correspondencia entre lo dicho y lo hecho; sin dobleces, ni falsa moral.
En cuanto a la enseñanza de la Historia mucho se ha debatido en los últimos años, por la importancia que esta reviste en la formación de las nuevas generaciones de cubanos. Ha sido este un tema de permanente análisis y promoción por el Ministerio de Educación, que año tras año, por solo mencionar un caso, lo aborda en el seminario de preparación de cada curso escolar.
De igual manera, la Educación Superior, la concibe también como una prioridad en los currículos de las diversas carreras.
No podrá haber amor a la Patria si desde las aulas no se trasmite —tal y como hace el profesor Manuel— el conocimiento sobre los sucesos más trascendentales de la nación y sus héroes, seres humanos con sentimientos, virtudes y defectos, para algunos mitificados, para otros olvidados.
En Entrega, el profe Manuel no solo convierte a los héroes en hombres y mujeres de carne y hueso, sino comenta hechos, los trae al presente y los devuelve a la historia, como un instrumento lúdico-educativo.
Y quizás esas prácticas suyas, basadas sobre todo en la sabiduría y en el amor que tiene de la asignatura, propiciaron que un número importante de alumnos decidieran participar en el concurso, y también que la conservadora profesora Hortensia, poco a poco, haya ido cambiando sus criterios negativos sobre él, hasta comprender que Manuel ama la profesión y es un verdadero educador.
Horacio Díaz Pendás*, el destacado Maestro, formador de generaciones de educadores, un apasionado de la Historia, señaló en una oportunidad:
“Estamos en el deber de continuar desarrollando una pedagogía de la emancipación con sólida base ética en pos del crecimiento espiritual. Así tendremos que continuar revolucionando métodos y procedimientos que fortalezcan como nunca antes el ejercicio del pensar por sí; la forja de un pensamiento crítico que desde nuestra historia, cultura y acerado compromiso con Cuba constituya antídoto contra los colonialismos culturales y hegemónicos”
En esa cuerda ha transitado Entrega, que tal y como expresé al principio ha visibilizado (aunque quizás no se lo haya propuesto de una forma tan explícita) un asunto trascendental para nuestra nación, como la educación y la Historia de Cuba.
La novela ha dignificado la figura del Maestro, la actuación de quienes como Manuel ven en el magisterio un sentido de la vida, y en la enseñanza de la Historia un camino para continuar siendo libres, independientes y soberanos. Esperemos entonces que tenga un final acertado y que triunfe la pedagogía, que confía en los jóvenes y que hace del aula el espacio ideal para hablar del ayer, del hoy y del mañana.
*En su artículo Para continuar pensando al Apóstol desde los Cuadernos Martianos, expuesto en el Seminario Nacional de Preparación del Curso Escolar 2019-2020.
también creo que fue una puesta en escena espectacular como creen muchos y una actuación excelente como todas las de el, creo que todos los maestros deben de estar orguyosos de que se hable de su profesión con ese amor, pienso que es importante que todos conoscamos la historia de nuestro país y darle la importancia que se merece nuestra historia es una de las más hermosas por no decir que la más bella, muchos se sacrificaron para que hoy tengamos la posibilidad de tener escuels como las nuestras pienso que los maestros deben de ser el ejemplo de su trabajo se crean las personalidades de cada personita que pasa por sus manos.
Excelente, espectacular,una puesta televisiva fresca con grandes actuaciones hasta de los más jóvenes artistas. Valió la pena sentarse a verla. Inteligente manera de llevar a las nuevas generaciones y al pueblo en general el interés por la historia. Felicitaciones para su guionista, director y elenco de profesionales y artistas.
Saludos, ha sido extraordinaria la actuación de Ray, como ha ensenado la historia de cuba, es fenomenal, no es oculto que la historia a veces un poco que cansa, ya que la recibimos desde la primaria hasta culminar la universidad, en ocasiones oímos o hacemos lo mismo y es por eso que muchos jóvenes no la ven con la misma perspectiva que debe tener, creo que deben tomar esta experiencia de la novela, el guionista Amílcar Salatti y Director Alberto Luberta Martínez, han sido espectaculares y geniales en la manera que han llevado esta trama y como nos ha entrado al corazón, tanto que a veces se nos olvida que hay otras tramas como los asesinatos, y es bueno saber que aún quedan personas que aman la historia de cuba, por favor no lo echen en un baúl sin fondo.
Soy educador y dirijo un centro escolar Secundaria Básica y tanto los trabajdores como estudiantes tienen una magnífica aceptación por la telenovela, pienso que el profesor realiza una labor preventiva magnífica desde la propia clase, sus clases son transformadoras y acorde a lo que busca el Ministerio de Educación, es incrible como te traslada a las clases de magníficos maestros de Historia y otras asignatura que he tenido, además un papel que dignifica la labor de los maestros porque otras series han pusto muy bajo la labor del maestro a mi criterio, así se enseña la Historia de Cuba para saber de dónde venimos , quiénes somos y a quiénes se lo debemos; por tanto para aquellos que ejercen esta bella profesión que vean en este maestro lo que necesitamos para educar y enseñar las nuevas generaciones.
La novela Entrega refleja en el profe Manuel como debemos ser los profesores, y también quiénes somos, que somos personas como todo el mundo con situaciones y problemas en la vida diaria, y que ser profesor es una profesión de sacrificios, de alma y corazón, y de ENTREGA y sobre todo en la enseñanza de la Historia de nuestra patria.
La Novela Entrega, demuestra un modelo correcto a seguir por parte de nuestros profesores. SE trata de un personaje creíble, humano, que tiene virtudes y defectos como todos, pero que enaltece su profesión y nos permite visibilizar los valores que deben ser defendidos desde nuestras aulas cubanas, por el bien de nuestras generaciones de cubanos.
muy bella esa novela y muy instructiva que nos deja una gran enseñanza, hace falta que sigan haciendo novelas como esa un escritor y un director muy talentosos, asi como el elenco que participa en ella, asi como las otras personas que intervienen que no las vemos como fue el trabajo de osvaldo doimeadios con los actores, muchas felicitaciones a todos, estoy muy complacida aunque faltan pocos capitulos para que concluya
Lo mejor que tiene la novela es la parte del profesor Manuel donde demuestra y siente en carne propia el amor por la historia de su patría. Es capaz de inculcarle a sus alumnos el valor del patríotismo, que cada profesor de esta asignatura siga su ejemplo aunque sea empleando sus propios métodos.
Muy linda novela, no como las expuestas anteriormente q no demuestran la realidad cubana, sólo una ínfima parte de ella. La actuación del profe, excelente como nos tiene acostumbrados. Hay q enseñar a los jóvenes a conocer a Cuba primero y a amar su historia y al extranjero, después.
Muy acertado el comentario sobre la novela entrega y creemos que sirva de ejemplo para el futuro comportamiento defes alumnos y profesores
Es extraordinariamente maravillosa y convincente la profunda y combativa actitud de ese talento joven que nos representa como educadores en Cuba. Nos demuestra qué tan importante es la preparación de un docente para tomar sus decisiones certeras sin causas ofencivas;( ser tolerante con razones y argumentos). El uso de sus métodos y procedimientos son valiosos y ante todo muy acogidos por estudiantes y familiares;menos los personajes ficticios de la sociedad. Pero los estás educando también,Manuel. Te admiro. FELICIDADES. NO VAYAS A FALLAR.Nos ayudas mucho con tu proceder como profesor.
Resaltar el papel del actor, su dominio en el arte para lograr lo que quiere, su entrega total al papel que representa, dando muestra que es un talento en la actuación.
Excelente articulo y excelente novela. Actuaciones de lujo en especial la de Manuel que se ha creido su palel de maestro y nos ha hecho participe a nosotros. Gracias por la ENTREGA de esta novela, de su equipo, gracias por hacernos pensar que somos capaces de hacer productos hermosos sin excesos de didactismo
Muy buen articulo, de la novela lo que más me gusta es ver el profesor porque además habla de nuestros heróes como fueron seres humanos.Ojalá muchos maestros y profesores se insperen en esto
Exlente comentario por muy duro es la realidad, felicitó a todos lo maestros y profesores sólamente recapitular el q se tenga su reflejo en la novela
Un artículo maravilloso y muy a tono con la realidad de estos tiempos, muy soltada y conocida por todos y que usted ha plasmado muy claramente. Al hablar del profesor otra excelencia de la actuación, afortunadamente aún existen maestros y profesores con dignidad, amor y apego a la patria y a la profesión. Pero lamentablemente es un tema que necesita de mucha atención por todas las áreas, dígase órganos, gobierno y personas involucradas, primeramente muchas familias cubanas que están muy lejos de la realidad y valores que se deben defender, porque sin querer olvidan que ese niño ,ese jóven de su casa, un día será alguién reconocido y con valores que los aplicaran con ellos mismos, y lo que le permitimos hoy si es bueno es bueno para ellos y bueno para la sociedad y si es malo también ese resultado es para ellos. Porque desgraciadamente los padres con la justificación de la premura conque se viven estos tiempos olvidan o relegan a un segundo plano lo primordial, lo esencial; lograr que su hijo sea un ser digno lleno de virtudes y no será más que orgullo para los padres y la sociedad, que en cierto sentido se está denigrando y despreciando algo de gran valor que se ofrece en nuestro país que es una educacíon gratuita, que muchos en el mundo añoran.En los hogares cubanos, se ha degradado la buena educación y las buenas costumbres que se han aprendido siempre por la oralidad y el ejemplo. Madres que gritan, maltratan, dicen palabras obcenas, al igual que maestros y quién sino son esos dos de los mejores ejemplos a seguir por un ser humano.
Recuerdo que en mi etapa de estudiante en la decada de los 70 hasta los 80 me encantaba la Historia en sentido general tenia profesores muy buenos y aun tengo las nociones de joven que guardo en mis conocimientos hasta hoy. Lastima que con tanta investigaciones realizadas que nos actualizan de la hermosa historia de Cuba no hayan muchos maestros como Manuel. Lastima que se desaproveche la presencia fisica de combatientes para que iintercambien en el aula con los estudiantes. Pero la novela nos deja entre otros mensajes muy claros como la dignidad y los principios del profesor cuando tiene moral, etica y conocimientos para estar frente al aula y ello solo no basta, hay que conocer a Cuba a sus maftires y heroes, hay qje gustarale la historia que se te erice la piel con lo que lees e investigas y emocionarte con
Cada actitud de nuestros patriotas y del pueblo para pararse frente al aula a impartir la asignagura e incentivar a los muchachos de la hidalguia de quienes nos dejaron a una Cuba libre. Eso hace Manuel y nos emociona. Orgullo deben sentir los profe de Historia. Gracias por Entrega. Gracias por el articulo.
Excelente articulo!!
En total acuerdo con lo planteado en el tema, soy graduada de Tec Medio en español Literatura y abandoné el sector hace tres años por el mismo precepto que se explica anteriormente: la ÉTICA, es que la verdad no sé como los maestros actuales tiene moral para acercarse a un padre a pedir dinero o algo semejante, tanto para fiestas , como para «comprar pruebas», es que acaso no se dan cuenta que los alumnos no son iguales pues no tienen el mismo nivel de aprendizaje, y …entonces ?, qué estamos haciendo? graduando muchachos que luego no saben nada,que llegan a sus centros de trabajo y no ofrecen credibilidad alguna de sus estudios.
También se podría analizar desde otro punto de vista: que el maestro tiene como todos, su propios problemas económicos, y mediante su profesión busca la manera de «lucharla» porque el salario no es suficiente para llegar ni siquiera a los primeros 15 días; pero no se justifica ya que estamos hablando de una noble profesión que debía ser escogida por aquellos que sientan la vocación y pasión que implica ejercerla.
Alina, cien por ciento de acuerdo con su artículo. No sigo la novela cada día, la he visto a veces y estoy de acuerdo con el profesor Manuel y sus métodos. De acuerdo con usted, todas las asignaturas hay que impartirlas con amor, pero la historia de la Patria más, es la única manera de ser un adulto que ame su patria, sus héroes y mártires, su historia, porque el recuerdo de un buen profesor o profesora que la impartió con amor y la prendó en nuestros corazones es muy importante y será para siempre. Converso con jóvenes de la edad de mi hija, de los comienzos del período especial y otros que tienen menos y me han dicho, «bueno, yo no había nacido cuando eso ocurrió» y yo le he respondido, tampoco cuando Martí y Maceo, entonces me dicen «es que lo dimos por arriba». Puede ser que lo hayan dado por arriba, pero lo principal es que faltó el amor y entonces quedó en el aire y se perdió, nunca lo aprendieron muchos hechos de nuestro historia, mucha sangre derramada para disfrutar lo que disfrutamos, desde Guamá hasta hoy. !Vivan Martí, Gómez y Maceo! !Viva el 24 de febrero! !Viva la Revolución cubana, que comenzó el 10 de octubre de 1868!