Las nuevas generaciones han sido protagonistas de la reedición de la caravana de la victoria que vuelve a entrar este 8 de enero desbordada de alegría por el triunfo y la continuidad, con razones para honrar a los rebeldes de antes y renovar el compromiso de los jóvenes de hoy que siguen haciendo por Cuba.
En 1959, cuando Fidel concluyó el recorrido, se dirigió al pueblo de Cuba, y dijo: «La alegría es inmensa. Y, sin embargo, queda mucho por hacer todavía. No nos engañamos creyendo que en lo adelante todo será fácil; quizá, en lo adelante todo sea más difícil».
Con el aliento de la caravana joven que llega a La Habana, el pueblo continúa perpetuando el legado de aquellos que cumplieron con su deber histórico.
El acto celebrado en la unidad empresarial de base Julio Antonio Mella, ubicada en el municipio Cotorro, se recibió en La Habana a la Caravana de la Libertad.
En la ceremonia estuvo presente la general de brigada Delsa Puebla Viltre, además de estudiantes, jóvenes, combatientes del Ejército Rebelde y pueblo en general.
Los caravanistas también hicieron una parada en la cervecería Guido Perez, del Cotorro en cuyo lugar también fue rememorada la efemérides del 8 de enero.
Las palabras centrales del acto las pronunció Angel Portuondo, primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas en el territorio periférico de la ciudad.
De igual modo, en el parque 9 de Abril de la referida demarcación fue depositada una ofrenda floral.
La caravana, como hace 61 años, inició su recorrido el pasado 2 de enero por Santiago de Cuba.
(Con información de Granma)