Un grupo de jueces profesionales, legos y otros trabajadores recibirán hoy diplomas de reconocimiento en el acto, en esta capital, por el aniversario 46 de la fundación del Tribunal Supremo Popular (TSP).
Los estímulos forman parte de las acciones por la efeméride, que incluyeron encuentros, exposiciones de documentos, de objetos de valor histórico y otras iniciativas, informó a la Agencia Cubana de Noticias Mailin Merencio Martín, Directora de Comunicación Institucional de la institución.
Explicó que la actividad en cuestión será en la propia sede del TSP, ubicado en el municipio capitalino de La Habana Vieja, donde radican su Presidente, Rubén Remigio Ferro; sus cinco Vicepresidentes, dos de las cuales son mujeres, Maricela Sosa Ravelo y Farah Maritza Saucedo Pérez, así como su Secretaria, Rufina de la Caridad Hernández Rodríguez.
Los jueces legos son aquellos ciudadanos cubanos sin titularidad jurídica que, elegidos por la asamblea del Poder Popular correspondiente, imparten justicia en los tribunales populares del país, en igualdad de derechos y deberes con los jueces profesionales.
El 23 de diciembre de 1973 el sistema judicial cubano experimentó un cambio sustancial en sus estructuras, reforzó la institucionalización de su funcionamiento y confirmó su rol de impartir justicia con apego a la Ley.
A la sazón, tomaron posesión de sus cargos los magistrados del Tribunal Supremo Popular y del Tribunal Provincial Popular en un día memorable: el nacimiento del abogado y Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz.
El Mayor llegó a ser uno de los líderes más sobresalientes de la Guerra de los Diez Años y con su célebre caballería camagüeyana alcanzó grandes victorias contra las tropas colonialistas españolas.
Pero los antecedentes del actual Sistema de Tribunales Populares (STP) se remontan al viernes 12 de octubre de 1962, cuando propuso su creación el primer ministro del Gobierno Revolucionario, Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, durante una de sus habituales visitas a la Universidad de La Habana.
(Tomado de ACN)