Desde el Palacio de Convenciones, donde en la tarde de este viernes se clausuró el VXIII Congreso de la Sociedad Cubana de Enfermería, ldalmis Infante Ochoa, presidenta del comité organizador y de la Sociedad Cubana de Enfermería, aseguró a Trabajadores que somos un pueblo muy afortunado “porque tenemos un Presidente (Miguel Díaz-Canel Bermúdez) que sabe conducir de forma diáfana y con mesura los procesos”.
Subrayó que nuestro pueblo siempre ha estado dispuesto a ayudar en todo lo necesario para que el país funcione y dijo que “contamos con potencialidades para organizarnos sin afectar los grandes proyectos de la economía”.
En relación con la asistencia pública, comentó que, al igual que otros organismos, se reorganizará sin afectar (o lo menos posible) los servicios. Resaltó la necesidad de minimizar los gastos y ahorrar los portadores energéticos. “Podemos colaborar en muchas cosas y contribuiremos en todo para que el país mantenga su funcionalidad”.
Por su parte, la licenciada en Enfermería Elsa Martínez Sariol, de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba, calificó la situación de compleja y difícil para todos los cubanos, quienes a partir de ahora deberán afrontar diversas disyuntivas.
“No obstante, venceremos todas estas barreras que hoy el imperialismo nos impone. Confío en que nuestro pueblo mantenga la comprensión y el valor para enfrentar cualquier obstáculo”.
De la Escuela Nacional de Salud Pública, la profesora e investigadora Inalvis Medina González, evaluó de muy “satisfactoria” la respuesta que está dando la población a las medidas que se han venido anunciando por estos días.
“Por ejemplo, hoy llegué al Palacio de Convenciones gracias al actuar de los compañeros que viajan en los carros estatales y que de manera voluntaria en muchos casos han recogido a quienes estábamos en las paradas. Gracias a eso llegué a tiempo a este congreso.
“El comentario mañanero era, precisamente, la necesidad de ayudarnos. ¡Este es el momento para unirnos!
En relación con la reorganización de las actividades, señaló que en su centro se han tomado algunas medidas encaminadas al ahorro de combustible, “de manera que la afectación sea lo menos posible para cumplir las metas desde el punto de vista laboral, y así contribuir a que el Ministerio de Salud Pública pueda disponer de más recursos para el área asistencial”.
De igual manera, la profesora de Informática Tania Pérez Valladares, de la Facultad de Enfermería Lidia Doce, del Hospital Miguel Enrique, de la capital, precisó que desde hace dos años aquí se ha venido trabajando la docencia desde los entornos virtuales, facilitando la educación a distancia de los estudiantes y el cumplimiento del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Quizás por eso en estos momentos estén en mejores condiciones para acatar las acciones asumidas con el objetivo de racionalizar el combustible y otros recursos.
La profesora comentó que, precisamente, asistió al VXIII Congreso de la Sociedad Cubana de Enfermería para exponer las experiencias relacionadas sobre el tema de cómo acortar las distancias entre la escuela y la casa, donde el profesor sea un mediador, un facilitador.
“Nada ni nadie detendrá nuestra obra. Reajustaremos programas y horarios, teniendo siempre presente el pensamiento de Fidel sobre la importancia de hacer ciencia y llevar adelante la Revolución”.