La Habana Vieja renace (+ Fotos)

Con vistas al aniversario 500 de la fundación de la villa San Cristóbal de La Habana, la Oficina del Historiador de la Ciudad (OHCH) se encuentra inmersa en un proceso de restauración de inmuebles emplazados en el Centro Histórico. Sobre los progresos realizados en el Capitolio Nacional  –edificio emblemático de la capital, proyecto principal de la Oficina y en restauración desde 2013–, las inauguraciones inminentes y los proyectos futuros, Trabajadores conversó con la Directora de Inversiones, Johanna Aedo Gutiérrez.

¿Qué labores competen a la Dirección de Inversiones de la OHCH?

Esta entidad se ocupa de administrar el financiamiento del Estado para reinvertir en la restauración del Centro Histórico –declarado Patrimonio de la Humanidad, por la Unesco, en 1982–, el Malecón tradicional y otras obras de interés estatal fuera del territorio, como la Casa de las Tejas Verdes, la Casa del Vedado y el Museo Napoleónico. Es un proyecto netamente social que como principal eje tiene la rehabilitación del patrimonio inmueble, así como todo lo que incida sobre el mismo desde el punto de vista social y urbanístico.

Como veladores del adecuado empleo del presupuesto estatal, llevamos a cabo el proceso inversionista para realizar las reparaciones necesarias: contratamos constructores, proyectistas, entidades especializadas y damos la puesta en marcha de conjunto con el explotador definitivo, que en el caso de los museos es la Dirección de Patrimonio Cultural de la OHCH.

Esta última aglutina a 10  grupos de inversiones, los cuales están distribuidos por todo el terreno de lo que nosotros llamamos la Zona para la Conservación. Ellos atienden un volumen de obras en función de la ubicación de las mismas: restauran los proyectos que más cercanos les resulten. De esta forma las obras, al quedar dentro de su territorio, pasan a formar parte de su plan de mantenimiento automáticamente.

¿Qué proyectos están en marcha en ocasión de arribar este año a los cinco siglos de la ciudad?

Todas las obras actuales forman parte de los compromisos de entrega para el  aniversario 500, y tenemos un plan bastante ambicioso con un amplio calendario en constante actualización. No solo las que se han inaugurado este año celebran el quinto centenario: la OHCH es promotora de la celebración, por lo que se viene trabajando desde hace años en la terminación de obras con vistas a esa fecha. Por ello, de las que se reparan hoy muchas son de continuación y pocas, nuevas, pues sería imposible terminarlas antes del 16 de noviembre si se hubieran iniciado en el 2019.

La obra cumbre de la OHCH es el Capitolio Nacional, que ya tiene toda el ala norte restaurada y además en utilización por parte de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP). Por la magnitud del inmueble, que es Patrimonio Nacional y ostenta grado patrimonial uno, las intervenciones se han ido desglosando –internamente–  por objetos de obra, de forma tal que se vaya chequeando el avance según los objetivos previstos a terminar en cada una de las  etapas contempladas.

En esta segunda fase se trabaja en el dorado de la cúpula, específicamente  en el área exterior y en las oficinas que se sitúan en el hemiciclo sur, cuya restauración concluirá para el aniversario de La Habana, en noviembre.

Además del Capitolio, en el tema museable estamos enfocados hacia la implementación de un concepto de museografía diferente al acostumbrado. El ejemplo perfecto es el Palacio del Segundo Cabo, primero en implementar las TICs (Tecnologías de la Información y la Comunicación).

Asimismo, en tributo al Día de la Rebeldía Nacional  – el pasado 24 de julio en la totalmente remozada y adoquinada Plazuela de Belén, también a cargo del mencionado organismo– fueron inaugurados la escuela secundaria básica Arturo Vilaboy, la planta alta de los Almacenes San José, una nueva sala en el Centro de Visitantes dedicada a la realidad aumentada y el proyecto Habana: Espacios Creativos, ubicado en la manzana Sarrá, donde también se fundó hace año y medio el Centro A+ Espacios Adolescentes.

¿Qué criterios se tienen en cuenta para seleccionar las instituciones que se someten a restauración y cómo se decide el orden en que serán reparadas?

La Oficina tiene un Plan Maestro, enfocado en la restauración y desarrollo integral y sostenible del Centro Histórico de La Habana, en el que se contempla el levantamiento de todos los inmuebles que hay en el territorio y el entorno que los rodea, teniendo en cuenta su grado patrimonial y el deterioro que presentan.

Este trabajo se realiza por ejes y no de manera aleatoria, a partir de puntos de concentración que están constituidos por las plazas fundacionales.  De manera general, estamos enfocados en la reanimación de todas las ubicadas en la localidad, en relación al urbanismo, la accesibilidad, la iluminación vial y la reparación de aceras.

Desde esos espacios, el proceso se desgaja hasta alcanzar las calles contiguas. El objetivo es hacer una reparación general de los aproximadamente tres km2 que abarca el Centro Histórico, por lo que estamos corriendo las labores hasta alcanzar la calle Egido, para culminar las reparaciones pertinentes en esa zona.

En el entorno a intervenir  han de identificarse los inmuebles que posean categoría patrimonial y deban ser salvados antes, así como los que se hallen en peores condiciones, y que quizás deban atravesar un proceso de apuntalamiento. Esto suele demorar debido a que el proceso de restauración tiene que convivir con vecinos, tanto dentro como fuera de los edificios, por lo que suele ser bastante dinámico y diferenciarse del de otras ciudades coloniales, en otros países, que no carecen de residentes.

El traslado de personas, la búsqueda de nuevas viviendas,  los derrumbes, la indisciplina social y el saqueo de edificios antiguos –mediante los que se pierden elementos ornamentales originales, como losas de mármol, barandas y vigas de madera– contribuyen también a retardar el plan establecido.

¿Existe algún proyecto específico encaminado hacia la reparación de las viviendas del Centro Histórico?

La Dirección de Inversiones tiene identificado el potencial de fondo habitacional deteriorado en el territorio, y cuenta con un programa de vivienda financiado por el crédito saudita –recibido por el país y utilizado también por Recursos Hidráulicos–, que se destinó al Centro Histórico por el prestigio del mismo para la restauración de sus residencias particulares. Sin embargo, no abarca la totalidad de estas. Tratamos de asociarlo a las que están conspirando o imbricadas con el proceso de restauración en los ejes principales, puesto que nuestra labor no es arreglar las casas de los pobladores, sino intervenir un inmueble y dejar creadas las condiciones mínimas en relación al entorno del mismo.

No obstante, esta institución, de conjunto con el Gobierno de La Habana Vieja  –que es el responsable de la situación de quienes conviven en ella– apoya dichos procesos en todo lo que esté a su alcance, debido a que se encuentra dentro de la zona y a que rectora lo que colinda con sus instalaciones y obras.

Esto se traduce en que nuestros inversionistas visitan constantemente domicilios para cooperar en temas de  apuntalamiento y dictámenes técnicos. Todos los interesados en realizar una modificación en su vivienda deben acudir al Plan Maestro –dependencia de la OHCH que hace las veces de Planificación Física en el Centro Histórico– donde se le atenderá e indicará el correcto proceder.  No obstante, reiteramos que no podemos disponer del presupuesto del Estado para reparar viviendas; es el Gobierno quien posee los mecanismos para resolver esos problemas, a través de subsidios y entidades que se le subordinan.

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Proyectos más recientes o notables realizados por este organismo

Enero:

• Tienda y Línea de Productos Bionaturales  (Farmacia Sarrá): comercializa sazones y productos para el tratamiento homeopático, todo de producción nacional.
• Residencia de profesores (Compostela)
• Gimnasio (Lamparilla 65)

Febrero:

• Monumento al Maine (Malecón)
• 4 Viviendas Prácticos del Puerto (O´Relly y Ave. Del Puerto)
• Tiendas El Abanico y Miniatura  (Edificio Prácticos del Puerto)

Marzo:

• Plazuela del Espíritu Santo
• Librería en la Casa del Obispo Espada (Plazuela del Ángel)
• Sala Maine, en el Palacio de los Capitanes Generales

 Abril:                  

• Claustro Sur del Convento de San Francisco de Asís
• Nueva Área de Fiestas en el Parque La Maestranza: se renovaron los inflables, todo el cercado perimetral, y se inauguró un campito de futbol para los infantes.

Junio:  

• Museo del Automóvil  (I Etapa):   Se culminó la fase inicial y se expone allí un auto clásico –un Chrysler de 1945 marca DeSoto– donado por Leal, como resultado de un premio que le otorgara la Cátedra de Arquitectura de los Estados Unidos.

Julio

• Plazuela de Belén (Mobiliario e iluminación, adoquinado y fachada del entorno)
• Escuela Secundaria Básica Arturo Vilaboy (Plaza del Cristo)
• Mercaderes 113 (2 Viviendas Nuevas y 10 Viviendas Rehabilitadas)
• Sala de fotografía y orfebrería en el museo Marqués de Arcos
• Taller de encuadernación de papel (Lamparilla 65)

Septiembre

• Muralla de Mar (Empedrado): Inauguración de un proyecto museográfico en los restos de la muralla que bordeaba La Habana en la época colonial, ubicados entre el Castillo de la Fuerza y el Seminario de San Carlos.

Octubre

• Castillo de Atarés: abrirá con un nuevo proyecto museográfico, donde se expondrán reproducciones de los inventos de DaVinci. El museo se integrará al programa cultural en función de la comunidad, por lo que también será sede de Rutas y Andares, el próximo verano.
• Museo del Ferrocarril, estación Cristina
• Centro de Formación para la Restauración y el Diseño (San Ignacio 314)

Noviembre

• Capitolio Nacional
• Cuartel del Ejército Libertador. Quinta de los Molinos
• Monumento a Calixto García (5ta Avenida y 146)
• Casa Asia.     (Mantenimiento General)
• Centro de Programación Audiovisual Tomás Gutierrez Alea (Titón)