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-¿Por qué dice que la ley Helms-Burton es inconstitucional?
“¿Qué tiempo tienes para escuchar?” —responde entre risas, insinuando que la explicación podría ser larga.
Así, en ese tono, distendido e informal, transcurrió la conversación con Soffiyah Elijah, abogada estadounidense miembro de la Brigada Venceremos, que recientemente festejó el 50 aniversario de su creación.
“Treinta años de labor como abogada en los Estados Unidos y dos décadas como profesora de leyes me permiten asegurar, sin que me quede la más mínima duda, que la Ley Helms-Burton es ilegal e inconstitucional, tomando en cuenta la propia Constitución de los Estados Unidos”, afirma enfática.
Elijah es directora ejecutiva de la Alianza de Familias por la Justicia, organización radicada en Nueva York. La valentía y persistencia han asentado su prestigio profesional como defensora de los derechos humanos, fundamentalmente de las comunidades de latinos y afrodescendientes encarcelados, víctimas de un sistema injusto y racista que ha denunciado sistemáticamente.
“La Helms-Burton ampara actos criminales y de agresión contra la soberanía de otros países, algo que nunca será legal. Uno de sus artículos permite establecer casos legales contra empresas o empresarios de países soberanos, sin tomar en consideración que sus procederes están amparados por legislaciones de Cuba y de sus respectivos países.
“En los Estados Unidos existe amparo legal para que el Gobierno nacionalice cuando así lo decide, tal como también reconoce la legislación cubana.
“Además, la propiedad privada de un estadounidense puede ser confiscada por las autoridades sin compensación financiera debido a un recurso que se conoce como eminent domain, frente al cual los ciudadanos no tienen ningún derecho de formar caso legal alguno.
“Pero la hipocresía de la Helms-Burton es tal que justifica actos de agresión financiera contra Cuba y permite que ciudadanos privados estadounidenses, incluso aquellos que ya fueron compensados, puedan presentar casos legales en nuestros tribunales contra instituciones de la isla o inversionistas extranjeros”.
¿Ha podido explicar estos detalles a las personas en Estados Unidos?
“En cada oportunidad que tengo, ante jóvenes, adultos, o quien sea, hablo de los actos de agresión de los Gobiernos de Estados Unidos contra el pueblo cubano; denuncio el bloqueo; y también les comento acerca de la Enmienda Platt, de la Ley Torricelli, y de todas las aristas criminales de la Helms-Burton. En mi país no existe una ley equivalente, totalmente estructurada, desde lo ilegal, para atacar la soberanía de otra nación.
“Esa denuncia, y el apoyo al pueblo cubano, me acompañarán mientras mi cuerpo tenga fuerzas para ello”.
¿Qué opinión le merece la iniciativa bipartidista presentada ante el Congreso y el Senado de los Estados Unidos a favor de que se levante la prohibición de viajar a Cuba?
“Cualquier persona solidaria con Cuba debería reunirse con sus congresistas y dejarles claro el apoyo a esa legislación. Es importante ser tajantes con que si no representan sus intereses, ellos, como ciudadanos estadounidenses, podrían sacarlos de sus oficinas.
“La iniciativa tiene posibilidades reales de avanzar si es apoyada por suficientes voces, para lo cual se requiere de una adecuada campaña de divulgación y educación a la ciudadanía. De paso deberíamos dejar claro, también, que ya es hora de “sacar de la oficina” al presidente Donald Trump”.
