En una tierra consagrada a no olvidar su historia, porque de ella ha dependido su devenir y la cultura de sus habitantes, no cabe otro ánimo que el de patentizar con orgullo lo que le define.
Con esas razones Migdalia Barreiro Cisneros, secretaria general de la Central de Trabajadores de Cuba en la provincia de Granma, valoró asuntos concernientes a estos días de celebraciones:
“Antes de conocer que seríamos la sede del acto central por el Día de la Rebeldía Nacional comenzamos a desplegar un grupo de actividades en saludo a la efeméride, como la estimulación a los centros destacados en la producción y los servicios, además de las jornadas de trabajo voluntario, durante las cuales desarrollamos tareas en el agro y, asimismo, se impulsaron obras sociales y del programa de la vivienda.
“Para ese momento hemos llevado a cabo un proceso en todos los colectivos laborales para dar a conocer en qué consiste la Ley Helms-Burton, y su significación para el país, de manera que los trabajadores pudieran expresar sus opiniones al respecto. Como era de esperar, el repudio fue unánime”, refirió la sindicalista.
Quienes hacen posible los resultados de la provincia son, precisamente, los trabajadores: ¿cómo ha sido el desempeño de estos en la última etapa evaluada?
En el período, de forma general, ha sido satisfactorio el quehacer y eso se evidencia en los logros del territorio, que avanza en el panorama social y económico, aun cuando persisten limitaciones con la entrada de materia prima, piezas y accesorios.
Igualmente se aprecia en el número de centros laborales que serán reconocidos el 24 de julio venidero: 10 con la condición de Vanguardia Nacional y 47 con otros reconocimientos que otorgan los sindicatos nacionales.
Quiero destacar que ese día, entre las órdenes, medallas y sellos que se darán a los afiliados más sobresalientes, entregaremos la Condición Héroes del Moncada a dos grupos que son emblemáticos para la cultura del país: la Guerrilla de Teatreros y la orquesta Original de Manzanillo, que dirige el maestro Pachi Naranjo.
Para el movimiento sindical esta etapa ha sido de mucho esfuerzo, y de un alto protagonismo de los trabajadores.
¿Cómo han sido acogidas las iniciativas de la CTC en estos momentos de evocaciones?
Los chequeos de emulación que se realizan han avivado la motivación en los colectivos. A nuestra organización le corresponde seleccionar a los que recibirán los reconocimientos Granma Triunfa y En 26, a partir de los resultados que han sido capaces de lograr en la producción, los servicios, la docencia, las finanzas, las tareas sindicales, la investigación, entre otros.
Los festejos por el 26 de Julio tienen también una connotación especial para los granmenses por el sentido histórico y por el contexto actual.
Aquí celebramos varios aniversarios. Se cumplen 150 años del comienzo de las guerras de independencia y del estreno del himno nacional, además del bicentenario del natalicio del Padre de la Patria, iniciador de las gestas de liberación.
En nuestro territorio se produjo el asalto al cuartel militar Carlos Manuel de Céspedes en la aurora del día de la Santa Ana, por estas costas desembarcó el yate Granma, y se radicalizó el pensamiento de lucha por la libertad definitiva en la Sierra Maestra. En la Plaza de la Patria de Bayamo Fidel pronunció su último discurso en conmemoración al Día de la Rebeldía Nacional, en el 2006, y aún llevamos en los corazones aquella frase: “Maravilloso todo, tenía que ser en Granma”.
Al invicto Comandante en Jefe dedicamos los mayores empeños y la resistencia ante las presiones de la potencia imperialista que insiste en doblegarnos. Por eso unos 5 mil afiliados, y todo un pueblo agradecido, estaremos celebrando de rojo y negro el 26 de Julio, sujetos a nuestras raíces y de cara a un mejor porvenir construido por los trabajadores.