Una emotiva explosión de música, danza y arte se producirá este fin de semana en el Museo de los Trabajadores Palacio de los Torcedores, cuando como parte del programa previsto para el verano en esa institución Monumento Nacional se presenten tres variados espectáculos para niños y adultos.
Para el sábado, a las diez de la mañana, en esa emblemática entidad perteneciente a la Central de Trabajadores de Cuba, está prevista para los infantes la actuación de las compañías de baile integradas por niños Fusión Flamenca, que dirige Dunia Machado; y Liberación, que capitanea la experimentada bailarina Karelia Silvia.
Durante la noche, a las 8:00 p.m., en el lujoso salón polivalente con estilo neoclásico italiano, en los altos del museo, se producirá un bailable con la Orquesta Jorrín, perteneciente a la Empresa Comercializadora de la Música y los Espectáculos Ignacio Piñeiro, creadora en la década de los años cincuenta del pasado siglo, bajo la conducción del maestro Enrique Jorrín, del célebre ritmo chachachá, además de cultivar otros géneros como el danzón y el mambo. Una oportunidad única para los bailadores jóvenes y para los que ya peinan canas de pasar una agradable noche en un ambiente familiar.
Para el domingo, a las 6:00 p.m., en esa misma sala se anuncia otra atrayente oferta cultural con la pasarela de modas con vestuarios masculinos del reconocido diseñador Vicente Blasco. La exhibición estará a cargo de la compañía Ecos, que dirige la reconocida exmodelo y maestra de esta expresión escénica, Gisleda de la Barca, quien contará con el apoyo de la agencia Revolucionarte. También actuarán los cantantes Claudia Beatriz y Reynaldo Pineda, así como la compañía de danzas Liberación.
Todos estos espectáculos, ideados y dirigidos por el colega Jorge Rivas Rodríguez para este espacio capitalino, están especialmente dedicados al aniversario 500 de la fundación de La Habana y a la Semana de la Cultura en Centro Habana, municipio capitalino donde se encuentra enclavado el Museo de los Trabajadores Palacio de los Torcedores, en la esquina de las calles San Miguel y Marques González, Cayo Hueso.