En la última jornada del recién finalizado IX Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), dialogamos con algunos de los delegados, quienes expusieron sus criterios en torno a la transgresora Ley Helms-Burton, arbitrariamente impuesta por Estados Unidos contra Cuba, y refirieron cómo, desde la cultura, puede enfrentarse ese engendro legislativo que atenta contra la independencia, la soberanía y la paz.
Honestidad y compromiso
Enfrentar, como artista y cubano, a la criminal Ley Helms-Burton es un asunto de principios. Creando desde la honestidad, con el compromiso de pensar y trabajar para nuestro pueblo, sin hacer concesiones a la banalidad, la mediocridad y el mal gusto, oponiéndonos al intrusismo profesional, es como mejor enarbolamos la bandera del pensamiento, de la ética y de la igualdad, y es la única manera —y la mejor— de defender las conquistas de la Revolución cubana ante las amenazadoras intenciones de la Ley Helms-Burton. Juan Carlos García Guridi, poeta e investigador. Presidente de la Uneac en la provincia de Mayabeque. Miembro del Consejo Nacional de la Uneac.
Enérgica ofensiva
Nuestro Noveno Congreso de la Uneac se movió, desde su proceso organizativo en todas las provincias, hacia un objetivo fundamental: cómo hacer más factible el trabajo de nuestros creadores, de fomentar su obra e integrarla al engranaje de la sociedad, en confrontación constante con el pueblo. Para ello es necesario que la cultura genere instituciones de nuevo tipo, que propicien las iniciativas locales, que cubran el gran diapasón de demandas que existen en las comunidades. Esa sería nuestra más enérgica ofensiva en contra de la Ley Helms-Burton, ante la cual estamos llamados a fortalecer la unidad y redimensionar las capacidades creativas generadas por la Revolución. Estamos claros en política cultural, pero es necesario reevaluar el papel de la cultura en estos tiempos, proceso en el que el artista debe de estar al centro, porque es él quien genera la obra de arte. Agustín Antonio Villafaña Rodríguez. Director General del estudio-galería y Proyecto Cultural Casa Yeti (Casa Verde). Miembro del Consejo Nacional de la Uneac.
La cultura vive
En mi criterio, la Ley HelmsBurton es una clara señal de anexionismo, el cual ha existido en Cuba desde el siglo XIX. El imperialismo quiere que aceptemos vernos como seres inferiores. Cuba, antes de Martí y de Antonio Maceo, sabe muy bien que su destino es la soberanía y la independencia, sin hacer concesiones a nuestros ideales de justicia social. La cultura cubana vive. Nancy Morejón Hernández, poeta, ensayista, crítica literaria y traductora. Premio Nacional de Literatura 2001. Miembro del Consejo Nacional de la Uneac.
Inteligencia y unidad
En todos los debates del Congreso de la Uneac, tanto en las provincias como ahora en la reunión final, han existido dos palabras claves: inteligencia y unidad. Y me refiero a la inteligencia desde la diversidad de expresiones artísticas, y a la unidad que debe existir entre los creadores y sus instituciones, así como con los demás organismos que conforman el sistema de la cultura cubana, la cual no es más que la más viva expresión del ser humano. Con inteligencia y unidad venceremos cualquier intento de dominación imperialista. Jorge Núñez Motes, presidente de la Uneac en Guantánamo. Miembro del Consejo Nacional de la UNEAC.
Barrera impenetrable
La principal tarea que tiene todo artista revolucionario es fortalecer la política cultural de la Revolución cubana, para lo cual las instituciones culturales deben desempeñar un papel muy importante. De tal manera erigiremos una barrera impenetrable para enfrentar la política hostil del Gobierno de los Estados Unidos con su absurda Ley Helms-Burton. Los creadores debemos trabajar teniendo como premisa la frase del inolvidable Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, cuando dijo: “Sin cultura no hay libertad posible”. Luciano Delfín Castillo Rodríguez, escritor, investigador, redactor, editor, profesor y periodista cubano. Director de la Cinemateca de Cuba. Miembro del Consejo Nacional de la Uneac.