Fidelito es un tipo famoso por todo San José de Las Lajas. Es Capitán de Salón de la pizzería Vitanova, un restaurante emblemático en la provincia de Mayabeque, colindante con el territorio habanero. Además, dirige los destinos sindicales de ese centro.
Este es el quinto congreso de la Central de Trabajadores (CTC) al que asiste como delegado. Con él conversamos minutos después que el compañero Ulises Guilarte De Nacimiento, integrante del Buró Político del Partido y secretario general de la CTC leyera la síntesis del Informe Central a este cónclave.
“Esperamos mucho de este XXI Congreso, dijo, aunque sabemos que no habrá nada de magia. No es que de golpe y porrazo se vayan a resolver todas las cosas. Lógicamente, obtendremos lo que seamos capaces de lograr y promover en nuestros centros laborales. Tenemos que buscar nuevas alternativas, las que en mi caso tienen que ver con el rescate de platos tradicionales, los cocteles nacionales y otras cosas imprescindibles para nuestra gastronomía.
“Eso no quiere decir que todo tenga que ser con productos importados. Nada de eso. En el país ,y muy específicamente en nuestro sector, tenemos que darle un mayor uso a lo que proviene de la tierra. ¿Por qué en nuestras cartas gastronómicas hay platos que no incluyen una vianda? ¿Por qué buscar vasos y copas para un restaurante enclavado en un ranchón cuando allí lo que debe prevalecer es lo rústico, o sea, el barro y la cerámica, productos que tenemos en Cuba?” se preguntó nuestro entrevistado.
“Sin dudas, el congreso deberá contribuir a romper los nudos que existen hoy en la economía y los servicios a lo largo de todo el país. Incluyo en esto la necesidad de que las administraciones oigan más a los trabajadores que más saben, pues en eso hay una gran reserva”, subrayó Fidel Ramón Pimienta.
“Vengo con muchas expectativas, y seguro de que entre todos sacaremos las mejores experiencias para salir adelante en nuestro proyecto socialista” dijo finalmente.