Acuerdo MLB-FCB: Detrás del ponche de Trump

Acuerdo MLB-FCB: Detrás del ponche de Trump

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Cuba-Tampa Bay en marzo del 2016
Cuba-Tampa Bay Rays en marzo del 2016

Sí, fue un jonrón justo, largo y suficiente para mandar a las gradas el tráfico humano de peloteros cubanos y el negocio ilícito y corrupto que florecía en la estructura profesional del béisbol estadounidense. No estaba condenado a morir desde su nacimiento el 19 de diciembre del 2018 como muchos especulan ahora. Estaba destinado a crecer desde la inteligencia y el talento.

El Acuerdo entre la Federación Cubana de Béisbol (FCB) y la Major League Baseball (MLB) pasaba por un campo minado, pero no debía morir con un ponche. Y mucho menos propinado por Donald Trump, Marcos Rubio y John Bolton, políticos con la cara bien dura en cuanto al compromiso con el pueblo estadounidense y con poco que ver con el mundo beisbolero.

Una y otra vez habrá que volver al inicio y no al supuesto final de esta historia. La negociación de casi tres años respondía a organizar la llegada al circuito de más alto nivel de nuestros jugadores sin que otro Yasiel Puig estuviera a punto de morir por el cartel mexicano Los Zetas; nadie necesitara comerse la página de su pasaporte como lo hizo José Dariel Abreú en un avión o simplemente no pudiera ser secuestrado como Leonys Martín por contrabandistas inescrupulosos.

Por supuesto, la otra cara de la moneda también necesitaba un orden que limpiara la imagen de decenas de acusaciones que llegaban de las agencias federales (FBI, DEA), sobre el involucramiento —a veces consentimiento— de algunos ejecutivos beisboleros de la MLB en el tráfico de peloteros cubanos hacia Estados Unidos. Quien lo dude, puede revisar el libro “Policía de béisbol: El lado oscuro del pasatiempo nacional de América”, del investigador Eddie Domínguez.

Con más de una amenaza de Marco Rubio tras la firma del documento por ambas partes aquel día memorable del último mes del pasado año, el Acuerdo se concretó y gateaba con seriedad a partir de la licencia otorgada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro a la MLB en el 2016, bajo el gobierno de Obama, para celebrar un acuerdo con la FCB.

Según un amplio reportaje de los periodistas Dave Sheinin  y Karen De Young aparecido en The Washington Post el mismo día que se firmó el Acuerdo, “los oficiales de la MLB estuvieron en contacto frecuente con la administración de Trump en las semanas y meses previos al anuncio, y confirmaron con la OFAC que la licencia aún era válida. A pesar del rechazo de la administración, la MLB cree que vale la pena seguir adelante con los beneficios humanitarios del nuevo acuerdo”.

El propio material de la prestigiosa publicación cita a Joe Kehoskie, consultor deportivo y ex agente de béisbol o representante de varios jugadores cubanos, quien definió lo alcanzado como “un jonrón” para ambas partes. «Cuba obtendrá una ganancia financiera inesperada, mientras que MLB terminará con los titulares relacionados con el contrabando, así como con un proceso de firma mucho más estructurado y controles de costos adicionales».

Por su parte el Comisionado de la MLB, Rob Manfred, durante una entrevista a ESPN en el juego de exhibición celebrado en La Habana con motivo de la visita de Obama a Cuba en marzo de 2016 promocionó esos esfuerzos y dijo: «La clave para nosotros es salir de una situación donde tenemos tráfico de personas y peloteros que asumen riesgos que simplemente no son aceptables para nosotros”.

El primer paso para la concreción real del Acuerdo llegaría hace unos días, el pasado 2 de abril, cuando la FCB cumplió la primera parte de lo pactado al hacer pública la lista de 34 jugadores amateurs (los llamados agentes libres con restricciones, menos de 25 años y sin llegar a seis temporadas), la cual fue entregada a la oficina del Comisionado de la MLB para ser repartida a los 30 equipos y con posterioridad comenzar las evaluaciones requeridas por los scouts.

La soberbia de los políticos no demoró. A la campaña inflamatoria de Marco Rubio se unió ahora el Asesor de Seguridad Nacional John Bolton, que en su cuenta de twitter apostó por una afirmación ridícula: “Cuba quiere usar a los jugadores de béisbol como peones económicos, vender sus derechos a las Grandes Ligas de Béisbol. El pasatiempo nacional de Estados Unidos no debe permitir el apoyo del régimen cubano a Maduro en Venezuela”.

¿Qué tendrá que ver la situación en la hermana Patria de Bolívar y Chávez con el pasatiempo nacional de Estados Unidos? ¿Es que acaso el segundo negocio de mayor ganancia deportiva del  mundo (La MLB genera por temporada alrededor 11 mil millones de dólares) se había lanzado sin tener en la mano una licencia concreta? ¿Por qué esta Cacería de Brujas rubricada al béisbol cubano y específicamente al Acuerdo?

La carta del Gobierno de EE.UU. a la MLB del pasado viernes 5 de abril muestra las razones en un trabalengua de palabras. El  periodista Jeff Passan, de ESPN, la puso íntegra en su cuenta de twitter este lunes cuando el Departamento de Estado decidió anular el Acuerdo.

Le escribimos para informarle sobre la aplicabilidad de una licencia general según el Reglamento de Control de Activos de Cuba, 31 C.F.R Parte 515 (CACR), a las actividades de la Oficina del Comisionado de Grandes Ligas de Béisbol (MLB).

En septiembre de 2016, el Departamento de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de la Tesorería de los EE.UU. proporcionó orientación por escrito a la MLB con respecto a varias actividades propuestas que involucran a Cuba y la Federación Cubana de Béisbol.

En particular, la OFAC indicó que ciertos pagos de la MLB a la Federación Cubana de Béisbol fueron autorizados por una licencia general que se encuentra en la sección 515.57 (e) de la CACR.

El CACR administrado por la OFAC prohíbe a todas las personas sujetas a la jurisdicción de los Estados Unidos comerciar con bienes en los que Cuba o un ciudadano cubano tengan intereses, salvo que estén autorizados o exentos.

La Sección 515.571 (e) del CACR autoriza las transacciones relacionadas con el Patrocinio o contratación de un nacional cubano para trabajar en los Estados Unidos en un estado de no emigrante o en virtud de otra autorización de viaje  por parte del gobierno de los EE. UU. o contratación de un nacional cubano.

A la luz de los hechos que se nos presentaron recientemente, y luego de consultar con el Departamento de Estado de los EE. UU., La OFAC determinó que los pagos de las Grandes Ligas a la Federación Cubana de Béisbol no están autorizados por la sección 515.571 (e) del CACR, porque un pago a La Federación Cubana de Béisbol es un pago al gobierno cubano.

Además, ninguna otra licencia general en el CACR autoriza estos pagos. Asimismo, los pagos de la MLB a la Federación Cubana de Béisbol están prohibidos a menos que estén específicamente autorizados por la OFAC. Si MLB desea hacer estos pagos, puede solicitar una licencia específica de la OFAC.

Más allá de la posición retrógrada, lo anterior pone al descubierto cuántos resquicios legales puede haber para que dos administraciones diferentes hagan cumplir una misma ley a su total conveniencia. ¿Ahora hace falta otra licencia? ¿Se anula de golpe y porrazo algo que ellos mismos reconocen entregaron? ¿Acaso los negocios que tienen líneas de aviación, cadenas de hoteles y otras entidades estadounidenses en Cuba no son directamente con el gobierno cubano?  ¿Si el Acuerdo estipula cómo se debe utilizar el dinero que reciba la FCB por qué asociarlo que irá a parar a las arcas del estado cubano?

En una carta de enero del 2019 a los Departamentos del Tesoro y del Estado, la MLB describió una vez más el propósito del Acuerdo: “El objetivo es poner fin al peligroso tráfico de jugadores de béisbol cubanos que desean jugar béisbol profesional en los Estados Unidos”. Sin embargo, eso parece importarle bien poco a Trump y sus “coaches” de un juego que ha desangrado en más de 400 peloteros a nuestro país por vías ilegales, con alimento a la corrupción y la violencia.

La Federación Cubana de Béisbol denunció la utilización con fines políticos de argumentos insostenibles para deshacer el Acuerdo, al cual considera como un instrumento imprescindible para preservar la integridad de los atletas ante el trato humillante y discriminatorio del que han sido víctimas. “Una vez más la historia pone en evidencia  quiénes son los verdaderos responsables de que nuestros atletas no puedan desempeñarse en ese circuito sin la necesidad de renunciar a su nacionalidad y correr riesgos para sus vidas”, concluye su comunicado.

¿Qué resta ahora? Dábamos por serio, seguro y no exento de obstáculos el Acuerdo con la MLB y en el que mucho tuvo que ver el apoyo del sindicato de jugadores de esa liga. La esperanza, la justa aspiración de nuestros jugadores de probarse en el mejor béisbol del mundo sin renunciar a su nacionalidad ni a vivir en Cuba recibió un ponche de Trump y sus compinches, pero un ponche de borrachera política y odio contra el que seguiremos peleando, porque el béisbol es a 27 out y nueve entradas.

 

 

 

 

 

Acerca del autor

Máster en Ciencias de la Comunicación. Director del Periódico Trabajadores desde el 1 de julio del 2024. Editor-jefe de la Redacción Deportiva desde 2007. Ha participado en coberturas periodísticas de Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Juegos Olímpicos, Copa Intercontinental de Béisbol, Clásico Mundial de Béisbol, Campeonatos Mundiales de Judo, entre otras. Profesor del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana, Cuba.

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4 comentarios en Acuerdo MLB-FCB: Detrás del ponche de Trump

  1. Amigos de la MD, la cancelación del acuerdo MLB vs FCB aun cuando no sorprenda completamente duele y mucho, molesta, irrita y deja una sensación de vacío, y más incertidumbre con la nuestra pelota querida, la de Cuba que por lo menos para nosotros es la más importante aunque sigamos y disfrutemos de toda la otra, aunque sepamos que esa, la otra, MLB; está a un nivel fuera del alcance de Cuba, si la nuestra nos da aunque sea el sano deseo de ir al Estadio, el inmenso orgullo de un equipo Cuba competitivo, entonces podemos ver la otra, pero sin sentir ese vacío.
    Les propongo echar un vistazo a lo que se debería hacer, no montarnos en el carro del lamento y el desánimo, por eso les propuse a Daimir hacer este escrito y debatirlo.
    A LA FCB, ES HORA DE ACTUAR; NO DE LAMENTARCE.
    El acuerdo esta cancelado, en realidad siempre fue un espejismo, que nos dio alegría pero los que estamos bien informado y eso en la MD es abc, sabíamos del laberinto de dificultades que tendría para llegar a feliz puerto, por tanto dedicar tiempo a lamentarse es inútil y no nos conducirá a ningún sitio.
    Aquí les propongo un listado de acciones que la FCB si realmente es autónoma como ahora defiende puede hacer, se llama en ajedrez contra-atacar.
    No quedarse con los brazos cruzados, ni regresar al punto en que estábamos antes de los pasos hacia adelante que dieron los gobiernos de Cuba y Estados Unidos que tuvo su punto más significativo cuando ambos presidente se sentaron uno al lado del otro en el estadio Latinoamericano a ver el juego Cuba vs Tamba Bay Rays, o cuando unos días antes fueron recibidos José Abreu, Yasiel Puig, y otros jugadores, y se dieron clínicas públicas, estos hechos, fueron en ese momento un sub-realismo, para los que crecimos con el estigma oficial en contra de MLB.
    ANTECEDENTES:
    • Durante décadas MLB no movió un dedo para acercarse a la FCB, y la FCB movió todos los dedos para estar lo más lejos posible.
    • A pesar de ello la FCB con el apoyo del gobierno monto un sistema competitivo que no solamente garantizo un espectáculo ampliamente popular y competitivo, sino que dé el salieron una lista muy grande de estrellas que se integraron a los equipos Cuba que jugaron y ganaron todo, y que nadie venga con el argumento, pero ganaron por que no fueron los de MLB, primero si no fueron es su problema y segundo en el primer clásico mundial donde llegamos con el equipo Cuba de esos amateurs se demostró que si se podía jugar de igual a igual.
    • Durante décadas la emigración de peloteros fue insignificante, si hacemos un ranking por posición de los 20 mejores en cada una antes del año 2000 prácticamente no emigro nadie.
    • Pero la emigración llego, y la FCB no reacciono, siguió con el mismo libreto, el de coaccionar, estigmatizar a los que se marchaban, no dejarlos visitar Cuba y todo lo demás, el resultado lo sabemos, más de 300 jugadores se fueron.
    • El escenario para el contrabando humano estaba montado, en ambos lados del estrecho de la Florida, haya le exigen renunciar a Cuba, acá no los dejaban emigrar legalmente.
    • El derecho de una compensación económica a la FCB es más que justo, pero ese derecho existió siempre, siempre con las mismas dificultades de hoy, el derecho existe pero también existen políticos dispuestos a impedirlo, y leyes que arropan a esos políticos, que hacer, te atrincheras a ese derecho o lo ignoras con gallardía, ignorar no significa renunciar, pero ser objetivo, no se va a lograr al corto plazo y difícilmente al mediano plazo.
    • Cuando Barak Obama cambio su política su basamento teórico no fue de, eh; estos cubanos son buena gente vamos a ayudarlos, todo lo contrario, él dijo esta política es obsoleta se ha aplicado por muchos años sin éxito, cambiémoslas, la FCB debe dejar de caer en el juego de Miami, ellos hacen el pie forzado y la FCB le hace la décima, mi opinión hay que ser creativos, inteligentes y valientes y decir, yo si voy a hacer lo que me es posible para eliminar el trafico humano.
    Federación Cubana de Béisbol, ustedes pueden y deben:
    1- Solicitar a la dirección general de inmigración del ministerio del Interior modificar las actuales normas migratorias referidas a los beisbolistas, “declarar nula a los efectos de Cuba cualquier declaración escrita que un jugador haga bajo las presiones norteamericanas para ser aceptado en MLB”. Significa que a los efectos de Cuba ese hombre sigue siendo cubano, puede seguir con sus propiedades en Cuba si las tiene, o adquirirlas en el futuro, traer un auto, tener cuenta bancaria, ejercer su derecho al voto y todas las demás prerrogativas de ser cubano. Demostrar así al mundo que Cuba no excluye a quienes en busca de un sueño se ven obligados a firmar un documento, sembrar la duda en el departamento del tesoro de que ese papel es letra muerta y que ese jugador pude literalmente jugar allí, ganar dólares y en algún momento regresar.
    2- Comunicar a MLB que la FCB declara una moratoria unilateral de exigir el derecho a compensación, hasta que los gobiernos de ambos países un día resuelvan este diferendo y hasta que el congreso de Estados Unidos finalmente derogue las leyes del bloqueo económico y financiero impuesto a Cuba de forma arbitraria y unilateral.
    3- Crear un mecanismo de liberación de los jugadores que así lo soliciten, para salir de Cuba legalmente, digamos entre el día posterior a la culminación de la serie nacional y 30 días antes de iniciar la próxima, una liberación que explícitamente diga puedes ir probar suerte de conseguir un contrato y regresar el día que quieras y jugar en Cuba si te lo ganas con rendimiento sin tener que hacer trámite alguno, exigir la llamada repatriación es onerosa, insostenible y contraproducente.
    4- Eliminar los requisitos de que hay que jugar la serie provincial y vivir en Cuba para jugar en la SN, que cada cual viva donde quiera y si quiere jugar la SN, siempre que se reporte en la fecha correcta a los entrenamientos y allí se gane el derecho no por nombre sino por rendimiento, “BIENVENIDO SEA”
    5- Declarar elegibles para ser convocados a equipos Cuba a todos los jugadores, jueguen o no en Cuba, estableciendo una política de conformación de equipos en la que solo una cifra razonable sea de los que no juegan en Cuba, dependiendo del nivel de la competencia esa cifra sería mayor o menor, ej. si son los Centro-americanos sería una cifra mínima, si es premier 12, seria 50% si es un clásico mundial son los mejores por posición jueguen donde jueguen. Si los convoco y MLB no los deja jugar quedaría claro quién es el culpable, no aplicar la esencia del cuento del gato hidráulico.
    6- Sentarse a negociar con la Nippon Professional Baseball (NPB), para lograr un acuerdo de cooperación y negocio.
    Es difícil, más bien complejo, eso es verdad, pero no es imposible, si se aplican métodos flexibles
    a- Organizar en Cuba la Liga Cubana de Béisbol Martin Dihigo, con 6 equipos y salarios ligeramente superiores a las ligas menores de Estados Unidos, el tema no es retener en Cuba los que tienen nivel para jugar en roster de 40, esos hoy son solo menos de 40, el tema es retener a los demás, hoy hay activos alrededor de 200 jugadores Cubanos fuera de Cuba y fuera de los rosters de 40 men.
    b- La NPB tendría exclusividad para firmar por periodos de hasta 5 temporadas y después transferirlos a MLB si así un equipo lo solicita, seria a la NPB a la que tendría que compensar MLB y de esta forma la NPB se resarce de parte o todo el gasto que haga en Cuba.
    Vallamos a la lista de 34, si Moinelo, Ariel, Raciel y Oscar Luis sus equipos en NPB pueden postearlos ahora mismo serian varios millones que NPB puede recibir, si un jugador cubano sabe que juega en Japón donde gana mucho más que en las ligas menores de MLB, y después puede ser posteado a MLB cuando más vale y así lograr desde su primera temporada en MLB un alto salario y ser parte del roster de 40 men, yo creo que eso permitiría regular el flujo incontrolado de emigración, y además sin emigrar de Cuba y más importante sin caer en las redes de Dominicana.
    NPB puede aceptar mucho más fácil que MLB que los jugadores en formación o sea hoy excepto Despaigne, Gracial y Moinelo los demás estarían disponibles para la SN.
    c- EDUCACION E INFORMACION. La educación y la información son la mejor forma para evitar la emigración, hay que crear un departamento de educación y formación no de teques políticos y patrioteros que hasta ahora no han resuelto el problema, que cada joven desde que está en 15/16 y sus padres y otros familiares, sepan todos los detalles del entramado a que se enfrentaran en el extranjero, sus reales posibilidades de firmar, las regulaciones de agente libre con restricciones, lo que gana en MiLB, y los trabajo que pasa, cuánto pagan las ligas del Caribe y a cuantos cubanos como promedio reciben realmente en sus clubes, cuanto le pagan, esto y la seguridad de poder salir sea directamente o a través de NPB les dará calma y no se marcharan en masa con menos de la edad para agente libre sin restricciones, si a esto le unes recibir los que incluso jugaron y ya no pueden hacerlo, tendría una SN decente en donde ese flujo de ir y venir traerá desarrollo y experiencia, mirar a Maikel Cáceres y saber cuánto fue mejor.
    Si todos los argumentos esgrimidos por la FCB de buena voluntad, de luchar contra el tráfico humano, de ayudar a no separar las familiar son de verdad estas y muchas otras ideas son las correctas, si el objetivo supremo es recibir ingresos líquidos, cash, mony, y manejarlos ellos, la FCB; entonces mi plan es letra muerta, y sugiero ir preparando el sepelio de la SN, y con ella del equipo Cuba, pues la emigración tomara nuevos aires y cada año que pase será más difícil revertir la situación.
    Amigos de la MD, si ustedes me preguntan en privado que porciento de posibilidad existe que la FCB bajo el mando de Higinio haga este o similar plan, mi respuesta en público es menos del 1%.
    Pero resulta que en Cuba existen decenas de dirigentes tan patrióticos y leales a Cuba o más que Higinio, pero audaces, capaces y eficientes, los grandes jefes lo saben y los conocen, solo es cuestión de decir, una nueva etapa es impostergable renovemos la dirección de la FCB y demostremos a Marco Rubio y sus acólitos que en Cuba la soberanía en todo la decidimos los verdaderos Cubanos.
    Muchas gracias.

  2. Es inaudito esto que está ocurriendo. Los peloteros cubanos siguen demostrando que brillan en cualquier pelota y esto le duele al gobierno nosteamericano, así como le duele todo lo que suene a Cuba.

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